Noah Lemmon fue diagnosticado con gastrosquisis, una condición en la que la pared abdominal no se forma por completo, por lo que los intestinos del bebé se desarrollan afuera cuando el pequeño nace.
Noah fue sometido a una cirugía a las pocas horas de nacer y, para salvarlo, los médicos lo metieron en una bolsa de plástico para mantener sus órganos expuestos protegidos y en su lugar.
“Ha sido una prueba muy dura para nuestra familia, pero Noah ha sido un verdadero luchador y tenemos mucha suerte de que haya superado todas las probabilidades en casa aspecto de su vida”, dijo Dorinda Vosloo, su madre.
Dorinda platicó al diario The Sun que ella y su pareja estaban emocionados cuando quedó embarazada a finales de 2018 después de seis meses de intentarlo.
Su embarazo fluyó con normalidad, pero en su ultrasonido de 12 semanas, el médico les dijo que sospechaba que su bebé presentaba gastrosquisis, una enfermedad de la que nunca antes habían escuchado.
"El ecografista salió de la habitación y llamó a otra persona. Estaba muy tenso. Me puse a llorar cuando supe que algo andaba mal", relató la mujer.
"Entró un segundo ecografista y explicó que podían ver una anormalidad en el abdomen de nuestro bebé. Nos llevaron a una sala separada donde los consultores nos sentaron y hablaron sobre las posibles condiciones que podría ser este defecto", agregó.
Días después, los futuros padres tuvieron una cita en el hospital especializado en Leicester, Reino Unido, donde se realizaron más exploraciones y se confirmó el diagnóstico de gastrosquisis.
"Fue desgarrador. Naturalmente, entras en tu primer examen abrumado de emoción y esperas que las cosas sean perfectas y cuando aprendes que no lo son, es extremadamente difícil aceptarlo", explicó.
Los doctores planearon una inducción durante 37 semanas, pero siete días antes de la fecha, su fuente se rompió.
Noah pesó 5 libras y nació el 28 de junio de 2019, fue llevado a cuidados intensivos inmediatamente después de nacer y dos horas más tarde fue a cirugía bajo anestesia local.
"Nos habíamos preparado para lo que iba a suceder cuando él nació, pero nada puede prepararte para ver a tu bebé recién nacido en una incubadora tan pronto como él nació. Tener que firmar el consentimiento para la cirugía, minutos después de dar a luz, es realmente difícil emocionalmente", comentó Dorinda.
"Todos estábamos muy emocionados de verlo y oramos por el mejor resultado posible. Los cirujanos hicieron un trabajo increíble y tuvimos mucha suerte de que Noah tuviera todo su intestino recuperado en dos horas después de nacer", agregó.
Ahora el pequeño está de vuelta en casa y acaba de disfrutar su primera Navidad.
Mientras tanto, su madre, creó una página de Instagram para documentar la vida de su hijo desde nació "porque quiero dar esperanza a otras familias si también reciben un diagnóstico de gastrosquisis y temen por lo peor como lo hicimos nosotros".
¿Qué es la gastrosquisis?
Es un defecto de nacimiento en la pared abdominal, en el cual los intestinos salen del cuerpo a través de un orificio al lado del ombligo. Esta abertura puede ser pequeña o grande y a veces también pueden salir otros órganos, como el estómago o el hígado.
Según los CDC, el bebé requerirá de una cirugía poco después de nacer para que introduzcan dichos órganos y le reparen la pared abdominal.
Aun después de la reparación, los pequeños pueden tener problemas con la alimentación, la digestión y la absorción de nutrientes.
Algunos bebés tienen este problema debido a un cambio en sus genes o cromosomas, pero también poder ser por una combinación de genes y otros factores, como los elementos con lo que entre en contacto la madre dentro del ambiente, o lo que coma o beba, o ciertos medicamentos que use durante la gestación.
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