Cuando Tommy, el hijo de Kirstie Webster comenzó a sufrir dolor de estómago, los médicos creyeron que se trataba de un simple estreñimiento. Pero después de semanas de agonía, descubrieron que el pequeño de seis años, tenía hepatoblastoma en etapa cuatro, un cáncer de hígado poco frecuente que afecta a los niños.
Kirstie platicó al diario The Sun que Tommy empezó a quejarse de malestar estomacal en marzo de este año, pero en ese momento los médicos creyeron que no era algo de qué preocuparse. "Me dijeron que era estreñimiento y le recetaron laxantes", dijo.
Sin embargo, su hijo continuaba presentando mucho dolor y terminó llevándolo a urgencias, pero nuevamente los médicos le dijeron que era estreñimiento y le dieron más laxantes.
Después de unas ocho semanas de ir y venir al hospital, ella sabía que algo andaba mal con su niño y por fin convenció a los expertos para que le hicieran una ecografía.
"Hemos encontrado algo", fueron las palabras con las que Kirstie asegura que su mundo llegó a su fin y, aunque era el peor día de su vida, sabía que tenía que ser fuerte para Tommy.
La mujer de 32 años relató que tuvieron que esperar una semana por los resultados de una biopsia que confirmaría el desgarrador diagnóstico: hepatoblastoma en etapa cuatro.
El estudio confirmó que había un tumor canceroso en el hígado de Tommy y ya se había extendido a sus pulmones.
"Dijeron que tiene un 50 % de posibilidades de combatirlo", comentó la madre
Tan solo dos días después de ser diagnosticado, comenzó su tratamiento de quimioterapia, pero un par de días después, fue ingresado a cuidados intensivos en otro hospital en el suroeste de Londres porque sus niveles de oxígeno habían bajado demasiado.
El menor permaneció allí durante una semana y afortunadamente comenzó a mejorar, por lo que fue trasladado de regreso al primer hospital en el oeste de Londres para continuar su tratamiento.
Kirstie, quien tiene otros dos hijos, Lexie, de siete años, y Teddy, de dos, señaló que, aunque Tommy sabía que no estaba bien, estaba ansioso por volver a correr y jugar de nuevo con sus hermanos, que no pudieron visitarlo en el hospital debido a las restricciones por la pandemia de coronavirus.
Por suerte, después de unas semanas internado, Tommy finalmente pudo regresar a casa para ver a sus hermanos y poder festejar su sexto cumpleaños.
Un largo camino por delante
Ahora, Tommy recibirá quimioterapia durante los próximos siete a nueve meses y regresará al hospital para continuar con un nuevo tratamiento.
"Tenemos un largo camino por delante. Recibirá quimioterapia durante meses y luego es posible que necesite una operación e incluso un trasplante de hígado", explicó.
A pesar de todo, Tommy se muestra optimista e incluso decidió afeitarse su cabello antes de que comenzara a caerse a causa de su tratamiento.
Por su lado, Kirstie ha creado un perfil en GofundMe para recaudar fondos y hacer realidad el sueño de su pequeño de visitar Disney World.
"Quiero mantener una sonrisa en su rostro y darle las cosas que quiere, como un incentivo para seguir adelante y hacer su vida un poco más fácil", concluyó.
De acuerdo con The Royal Marsden, el hepatoblastoma es un tumor canceroso del hígado que generalmente ocurre en niños y afecta de 10 a 15 pequeños al año.
Generalmente se presenta como un bulto en el estómago, y puede provocar pérdida de peso y apetito, letargo, fiebre, vómitos e icteria (piel y ojos amarillentos).
Su tratamiento por lo general incluye quimioterapia y cirugía y, en algunas ocasiones, un trasplante de hígado.
Su pronóstico depende del tipo, posición y tamaño del tumor, pero por suerte, muchos niños con este problema se curan.
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