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Lactancia materna: cada mujer tiene su experiencia y no es para todas

La lactancia materna es una práctica saludable para las mamás y los bebés, pero no es una experiencia gratificante o favorable para todas.

La lactancia materna aporta muchos beneficios para la salud tanto del bebé como de la madre. No obstante, cada mujer tiene su experiencia al respecto y no es una práctica que todas puedan llevar a cabo de la mejor manera.

Según un estudio citado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), si casi el total de bebés del mundo fueran alimentados con leche materna, se salvarían cada año alrededor de 820 mil vidas de infantes.

De acuerdo con datos de la misma organización, a nivel mundial solo el 40% de los bebés menores de seis meses son amamantados y se alimentan exclusivamente con leche materna.

La OMS promueve activamente la lactancia materna como la mejor fuente de alimentación para bebés y niños pequeños.

Incluso, la UNICEF indica que la leche materna es la "primera vacuna" para recién nacidos y podría salvarles la vida.

Entre los beneficios que se han descubierto de la lactancia, los científicos indican que amamantar es bueno también para la salud cardíaca de la mamá, y además esta práctica reduciría a la mitad su riesgo de muerte súbita del bebé.

En respuesta a la iniciativa de la OMS para promover esta forma de alimentación de los bebés, en los Estados Unidos se declaró hace años que agosto es el mes nacional de concientización sobre la lactancia materna.

Sin embargo, cada madre tiene una experiencia distinta respecto de la lactancia, pues hay quienes vivieron una lactancia mágica, pero también hay otras mujeres que sufrieron mucho al amamantar.

Una experiencia gratificante

Micol Zimmerman-Burkeman consultora de educación de Massachusetts, fue entrevistada, junto con otras cinco mujeres, por el portal del programa de la cadena NBC "Today" y relató su experiencia. "Me encantó la intimidad de la lactancia materna".

Micol destacó que el ritual de alimentar a sus hijos le permitió a ella pasar tiempo con los pequeños para crear un vínculo especial.

Otra mujer, Aura Skigen, fisioterapeuta de Arlington, Virginia, tuvo una experiencia similar a Micol: "Me encantó la oportunidad de relacionarme con mis bebés", mencionó.

Aura reconoció en la entrevista que la lactancia materna le regaló la oportunidad de realmente disfrutar el tiempo uno a uno con sus hijos.

Difícil, pero con perseverancia

Jen Saxton, CEO y fundadora de Tot Squad, de los Ángeles, tenía abundante leche materna, hecho que provocó que se le obstruyeran conductos mamarios y tuviera un doloroso padecimiento llamado mastitis.

A pesar de su dolor, Jen no dejó de amamantar a su hija. "Me encanta que podamos ir a cualquier parte y olvidar todo y mientras nos tengamos la una a la otra", dijo Saxton a "Today".

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Colleen Kurson, consejera de salud mental, tuvo el problema opuesto a Jane, pues sus glándulas mamarias no producían la leche necesaria para alimentar a su primer bebé.

Debido a este mal, y después de intentarlo varios días, Colleen decidió complementar la alimentación de su hijo con fórmula.

"Lo vi como vital para la salud de mi recién nacido y me alegré de aliviar un poco la presión", mencionó la consejera de salud mental durante su entrevista con el portal del programa televisivo.

Intentarlo, pero amamantar no es para todas

Kristen Barry, editora independiente de Long Island, Nueva York, dijo en su entrevista: "simplemente no disfruté tener a otro ser humano atrapado en mis pezones hasta que sangraran. Fue incómodo y temía cada vez que tenía que darle de comer a mi bebé".

Diez días después de que nació su pequeño, Kristen mezcló una botella de fórmula y se olvidó por completo de amamantar con gran alivio.

No todas pueden, y está bien

Joey Bartolomeo, escritora radicada en Manhattan, tuvo una muy mala experiencia al intentar amamantar a su primer hijo, por ello, decidió ni siquiera intentarlo con su segundo bebé.

Con su primer hijo, la leche de Joey no salía y su bebé no podía alimentarse. "Me sentí un poco como si hubiera fracasado desde el principio", reveló en su entrevista.

Intentó todas las recomendaciones que le hicieron los profesionales especialistas en lactancia que visitó, pero al final, no hubo solución y no pudo amamantar a su hijo.

"Muchas de nosotras no podemos hacerlo, y eso está bien", dijo Joey en entrevista con el portal. Añadió: "Tenemos que decirnos eso el uno al otro. Nuestros bebés están siendo alimentados y eso es lo que importa".

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