Victoria Vanstone disfrutaba de ser catalogada como una joven fiestera y atrevida, durante 20 años llevó un estilo de vida en el que el alcohol estaba presente casi todos los días.
A los 35 años la mujer originaria de Brighton, Inglaterra, se embarazó por primera vez y fue momento de poner un alto a su consumo de bebidas alcohólicas, por primera vez en dos décadas, de acuerdo con información de The Sun.
Luego de dar a luz a su primer hijo, Victoria retomó su poco saludable estilo de vida, sin importar las consecuencias que el alcohol tenía en su organismo.
Ella misma ha compartido su experiencia en el blog DrunkMummySoberMummy, con la esperanza de que otras mujeres en esta situación puedan aprender de lo que ella vivió y sufrió para poder dejar la bebida y adoptar en estilo de vida sano.
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Tras convertirse en mamá Victoria esperaba con ansias el día en que pudiera salir y “ser ella misma otra vez”, así que en cuanto pudo dejar al bebé con su esposo organizó una salida con sus amigos y no terminó nada bien.
Cuando volvió a casa estaba completamente ebria, no podía ni sostenerse para cargar a su bebé y estaba cubierta en vómito.
Su esposo intentaba calmar a su hijo, quien no paraba de llorar porque necesitaba ser amamantado, y al mismo tiempo metía a Victoria a la bañera.
“Enchufó la manguera y me roció, completamente vestida, como un cuidador del zoológico que estaba lavando a un elefante fangoso… Vi trozos de mi vómito alojados en el agujero del tapón", explicó en su blog.
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Al día siguiente la resaca le impidió levantarse de la cama y cuando recordó lo que había ocurrido la noche anterior se sintió completamente “rota”.
“Cuando cerré las cortinas, un flashback repentino me saltó a la cabeza, una imagen de mi tropezando en el baño, con mi sostén apretado alrededor de mi cintura, exigiendo que mi esposo entregara al bebé”, relató en su texto.
Luego de esta experiencia decidió dejar de beber, pero el camino no fue sencillo, tuvo varias recaídas. El amor y comprensión de su esposo la ayudaron a salir adelante para alcanzar su objetivo: permanecer sobria.
Victoria tiene tres hijos y ha conseguido pasar dos años sin beber una sola gota de alcohol, ahora disfruta su vida y maternidad más que nunca.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud alrededor de tres millones de personas mueren cada año en el mundo por enfermedades derivadas del alcoholismo o accidentes relacionados con este padecimiento.
La OMS señala que en el mundo hay 23 millones de hombres y 46 millones de mujeres que padecen trastornos por consumo de alcohol.
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