En la actualidad, muchas personas buscan algún tipo de dieta que les ayude a perder el peso que obtuvieron durante esta etapa de confinamiento, y hay una que se ha hecho popular en los últimos días, que es conocida como el ayuno intermitente.
Lo que pocos saben, es que este proceso se basa en la autofagia, es decir, un mecanismo de limpieza de las células que las renueva, evitando que se acumulen productos de deshecho y componentes que ya no funcionan bien.
Este proceso ocurre de forma constante, a una intensidad baja pero suficiente para mantener nuestras células en óptimas condiciones, hasta llegar a renovar todo su contenido a lo largo del tiempo.
Cuando la energía escasea, las células son capaces de incrementar su autofagia para abastecer la demanda de nutrientes y elementos esenciales, y de paso, aceleran la renovación de las estructuras celulares, retrasando el envejecimiento.
El bioquímico británico Christian de Duve, fue uno de los primeros en comprender este mecanismo, al descubrir que los lisosomas, orgánulos encargados de la digestión celular, "reciclan" virus, bacterias y proteínas sin uso, para después reconvertirlas en nuevas moléculas cuya función estuviera intacta.
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Duve fue seguido muy de cerca por el biólogo celular japonés Yoshinori Ohsumi, quien decidió estudiar la autofagia a lo largo de su carrera. Su dedicación le llevó a detallar en profundidad los procesos biológicos que esconde este mecanismo, lo que le valió el Premio Nobel de Medicina en 2016.
A partir de dicho descubrimiento se realizaron varios estudios, y la mayoría apuntan a una relación entre los procesos biológicos que desempeña la autofagia con una mayor salud.
La teoría sostiene que si se llega a controlar este mecanismo a través de nuestra ingesta de alimentos, seremos más fuertes y perderemos peso con más facilidad, al deshacerse el organismo por sí solo de todas las bacterias o proteínas dañadas.
Es así como las células responden al ayuno intermitente y activan el proceso de autofagia, lo que significa que se puede promover un estilo de vida más saludable, según revela la revista Cell Reports.
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Al respecto, el profesor Ioannis Nezis, de la Facultad de Ciencias de la Vida de la Universidad de Warwick, explica que "comprender los mecanismos moleculares de activación de los genes de autofagia durante el ayuno, nos ayudará a usar intervenciones para activar las vías autofágicas para mantener un peso corporal normal y promover un bienestar saludable".
Pero eso no es todo, pues en la actualidad se sabe que varias enfermedades neurodegenerativas, cardiovasculares, autoinmunes, metabólicas o diversos tipos de cáncer se relacionan con fallos en la autofagia.
De esta manera, parece que mantener unos niveles adecuados de autofagia en nuestro organismo podría ser clave para gozar de una vida larga y saludable, aunque quizá la idea de ayunar durante días no nos parezca muy atractiva. Sin embargo, algunos hábitos saludables como la práctica de ejercicio físico también aumentan la autofagia.
De cualquier modo, si piensas que un cambio en tu dieta podría ser satisfactorio a través de un tipo de ayuno, lo recomendable es ponerte en contacto con un especialista que te asesore para no correr ningún riesgo.
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