Estados Unidos se enfrenta a una posible bomba de tiempo demográfica que podría agravarse con la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2, esto derivado de que en el 2019 se registró el nivel más bajo de nacimientos en 35 años.
Según datos del Centro Nacional de Estadísticas de Salud (NCHS por su sigla en inglés), en el 2019 nacieron 3.75 millones de bebés, un 1 % menos que el año anterior.
Un reportaje publicado por la agencia AFP indica que la tasa de natalidad en EE. UU. comenzó a disminuir desde la crisis económica del 2008, ya que lo expertos creen que luego de periodos de declive económico, las parejas toman pausas en sus planes de procreación.
Por eso se cree que por la emergencia sanitaria que se vive actualmente y que ya está causando una nueva crisis económica mundial, la generación millennial, que ya se encuentra en su momento reproductivo pico, podría retrasar el inicio de su expansión familiar.
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El informe del NCHS también arroja buenos datos, por ejemplo, que los nacimientos en madres adolescentes han disminuido de forma notable, un 5 %.
En las mujeres de 20 a 26 años también registraron una caída en la tasa de natalidad, mientras que las de edades de 35 a 39 años se mantuvieron igual que el año anterior.
Lo que llama la atención del estudio es que en las mujeres mayores de 40 años la tasa de natalidad aumentó en un 2 %, una tendencia que comenzó a notarse desde 1935, según los expertos citados por la AFP esto es una muestra de cómo las posturas hacia la paternidad han ido cambiando de tal forma que los ciudadanos de EE. UU. están retrasando el nacimiento de sus hijos y a optar por tener una menor cantidad de ellos.
La ginecóloga Eve Feinberg, consultada por el portal Insider, mencionó que también cree que las tasas de natalidad se han visto afectadas por la información errónea sobre cómo funciona la fertilidad.
“La gente sobreestima el éxito del tratamiento de fertilidad. Si bien es exitoso, tiene limitaciones en edades más avanzadas”, explicó Feinberg.
Otro dato importante del informe es que la tasa de partos por cesárea se redujo a menos del 32 % y el número de nacimientos prematuros aumentó a más del 10 % por quinto año consecutivo.
Sobre la bomba de tiempo demográfica, hay varios expertos que aseguran que EE. UU. podría llegar a un momento en el que no haya suficientes jóvenes para apoyar la economía ni generar dinero para las pensiones de las personas mayores que, gracias a los avances médicos, viven por más tiempo.
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Según reporta Insider, estas bombas de tiempo podrían llevar a la extinción de la población de un país, así que con la baja natalidad del 2019 y la posible caída en 2020 por la pandemia, el riesgo es mayor.
El citado medio indica que, mientras que las celebridades están presumiendo sus embarazos en redes sociales, la mayoría de la población que se encontraba en tratamientos de fertilidad ha tenido que suspenderlos debido a la crisis y es posible que ya no lo intenten cuando la pandemia termine.
También muchas parejas han decidido no tener hijos porque hay poca información de los riesgos que corre una mujer embarazada y sus futuros hijos si se llega a contraer el COVID-19.
Hans-Peter Kohler, investigador de fertilidad de la Universidad de Pensilvania, indicó sobre la natalidad, “La disminución debida a COVID-19 podría ser diferente dada la extensión y severidad de la crisis, y la incertidumbre duradera causada por ella”.
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