Granya González, especialista en hipnosis para adelgazar, visitó el set de "Un Nuevo Día" para explicar todo acerca de la banda gástrica virtual, una nueva técnica que promete ayudarte a bajar de peso con el poder de la mente.
"Es un tratamiento psicológico para adelgazar, el hambre está en la mente y a través de sugestiones la persona siente que su estómago está reducido de cierto tamaño y come menos", comentó.
La experta señaló que, este método consiste en realizar un proceso de relajación donde la persona se imagina que tiene una banda en el estómago que reduce su tamaño.
"Lo que ponemos es la mente a trabajar en positivo, y que tú sientas que realmente estás operada. Lo que buscamos con esta banda gástrica es un equilibrio mental, donde no hay ningún alimento malo", aseguró.
Asimismo, platicó que, este tratamiento psicológico tiene como objetivo eliminar la palabra "dieta", para evitar que "en la prohibición entre el deseo" por comer ciertos productos.
González indicó que se hace una sola sesión, y una vez que termina la parte teórica, se hace el proceso de hipnosis, para después dar lugar a 90 días de post-operatorio, en los cuales los pacientes escuchan audios en las mañanas y en las noches con los mensajes subliminales que les harán cambiar positivamente sus pensamientos.
¿Realmente funciona?
Gemma Padrón, una paciente que bajó 25 libras en tan solo siete meses platicó a Adamari López su experiencia con este prometedor tratamiento.
"Yo me realicé en 2017, bajé 25 libras y desde el momento que las bajé no las he vuelto a subir. Llega un momento en el que tú estás comiendo y el estómago te dice ‘hey para’ y tú frenas", admitió.
Mientras que Sharon Luchsinger, perdió 11 libras en tres semanas. "Ha sido un cambio de vida súper importante, no solo por lo estético sino también por la salud".
"Ha sido un reto para mí porque yo soy muy ‘picky’ para comer, hay muchas cosas que no me gustan y me he tenido que adaptar para seguir el tratamiento con éxito", añadió.
Según el sitio Sanihub, la banda gástrica virtual es una técnica que combina la hipnosis y la reprogramación subliminal para hacerle creer al estómago que es más pequeño de lo que realmente es. Esto con la intención de reducir la ingesta de alimentos y favorecer la pérdida de peso.
En este tipo de tratamiento, el paciente tiene que aprender a llevar una dieta equilibrada de forma voluntaria y sin esfuerzo para evitar el ya conocido ‘efecto rebote’. Por lo que, a través de la hipnosis, la persona recibe mensajes de rutinas saludables que pondrá en práctica después de la sesión.
¿Cómo funciona?
Actúa de forma similar a las bandas de reducción de estómago, es decir, limita la cantidad de comida que se ingiere para poder perder peso.
Sin embargo, para poder obtener esa sensación de saciedad sin utilizar ningún dispositivo externo, el paciente deberá acudir a una sesión de hipnosis.
Una vez que la persona se encuentra en un estado de semi consciencia, recibirá mensajes subliminales para disminuir el deseo por comer y adoptar un estilo de vida saludable.
Esta técnica está basada en técnicas psicológicas de terapia cognitiva-conductual (TCC), y debe ser reforzada cada cierto tiempo, pues los mensajes van perdiendo efectividad con el paso de los días, sobre todo en tratamientos largos.
Pero, además de recibir grabaciones que el paciente escuchará de forma periódica, deberá acudir puntualmente a otras sesiones de hipnosis para adaptar los mensajes en función del momento en el que se encuentre.
Por otro lado, la banda gástrica virtual puede ser también un procedimiento complementario a otros tratamientos quirúrgicos de reducción de estómago, ayudando a la persona a adquirir un nuevo estilo de vida sin tanto esfuerzo.
Pero, ¿cuáles son sus pros y contras?
Su principal ventaja es que no existe una intervención quirúrgica de ningún tipo, por lo tanto, es un tratamiento no invasivo.
Así que, si le tienes miedo al bisturí, es una excelente opción para ti, pues no requiere hospitalización, ni deja cicatrices.
Otro de sus pros es que permite ver resultados desde el comienzo, es decir, pierdes peso desde la primera semana de tratamiento, lo que, a su vez, favorece tu autoestima y fortalece las creencias de las nuevas rutinas.
Por si fuera poco, su costo suele ser menor que el de otras técnicas de reducción de estómago, como el bypass gástrico.
No obstante, al tratarse de un proceso relativamente nuevo en la industria, no existe suficiente evidencia científica de resultados a largo plazo.
Asimismo, es necesario que la persona tenga en mente que debe acudir a sesiones de reforzamiento para que los mensajes subliminales no pierdan efecto.
¿Te animarías a probar esta técnica?
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