En los últimos meses han surgido varios reportes de un trastorno que afecta la sexualidad femenina, llamado síndrome de la vagina muerta, el cual ocurre, supuestamente, por el abuso del uso de vibradores, de tal forma que la vagina se desensibiliza a tal grado que resulta imposible alcanzar un orgasmo.
¿Es eso cierto? Un estudio realizado por la National Institutes of Health reveló que tras un uso prolongado de usar vibradores para la auto estimulación sexual, se insensibiliza la zona, pero, apunta el estudio, que tras un descanso de máximo una hora, esa sensación desaparece.
Nicole Prause, neurocientífica y psicofisióloga sexual, que se encarga de estudiar los efectos de los vibradores, señala que, "Lo que las mujeres pueden notar es que si intentan cambiar a una estimulación de menor intensidad, después de una vibración de alta intensidad dentro de la misma sesión de sexo, esa estimulación sí va a ser menos efectiva, pero nada más".
Además señala que no hay datos científicos que respalden las afirmaciones de que existe un síndrome de la vagina muerta.
Raúl Padilla, sexólogo y psicoterapeuta de pareja, comentó al diario La Vanguardia que el uso de dildos pueden hacer que la mente se aburra con otros tipos de estimulación sexual menos enérgicas.
"Somos seres biológicos, psicológicos y sociales en todas nuestras dimensiones, y sexualmente también, de ahí que la sencillez en conseguir el orgasmo con la estimulación del vibrador hace que la mente se ‘aburra’ con otro tipo de estimulación menos enérgica y produzca la sensación de adormecimiento", mencionó el sexólogo.
Por otro lado, la médica obstetra Sherry Ross, quien además es autora del libro "She-ology: The Definitive Guide to Women's Intimate Health", menciona que "Usar un vibrador puede ser la forma más eficiente de tener un orgasmo".
Y recomienda que, en caso de tener la sensación de que la vagina se adormeció, esperar unos minutos a que el cuerpo se recupere. Sin embargo advierte que en caso que eso no ocurra, puede tratarse de un problema más serio, que no tiene relación con el uso de juguetes sexuales para la masturbación.
"A diferencia de los hombres, el deseo sexual, la emoción y la energía de las mujeres, tienden a comenzar en el cerebro", por lo que recomienda que primero las mujeres acudan al ginecólogo para descartar cualquier infección o algún problema médico mayor, "El siguiente paso será evaluar si está sometida a demasiado estrés, hay de obesidad, un trastorno del estado de ánimo, abuso de alcohol, drogas o tabaco".
La sensación de vagina adormecida no es algo tan extraño, según un estudio realizado por el Journal of Sexual Medicine, cerca de un 16 % de las mujeres encuestadas afirmó que tras tener actividad sexual sentían una especie de entumecimiento en sus genitales. La investigación define esa sensación como un efecto transitorio entre la relación del órgano sexual y el cerebro.
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