Los humanos disfrutamos de tener relaciones sexuales, platicar sobre sexo y hasta fantasear con él, pero más allá de lo bien que se siente estar en la intimidad con alguien más y alcanzar el orgasmo, un psicólogo plantea que buscamos algo más en estos momentos llenos de pasión.
Además del placer, el sexo cumple la función biológica de la reproducción y conservación de la especia humana, pero este tampoco es el motivo que nos lleva a pensar y tener sexo, de ser así no existirían los anticonceptivos.
El psicólogo Randall Collins asegura que son los rituales de interacción lo que vuelve tan atractivas las relaciones sexuales. El intercambio de miradas, las palabras dichas en voz baja, el contacto piel con piel y los besos generan un ambiente propicio para disfrutar del otro en un nivel mucho más íntimo y exclusivo.
En su libro ‘Interaction Ritual Chains’, Collins explica que el sexo es parte de una construcción social en la que se crean lazos intensos con una o más personas.
Las personas no están hechas para vivir en soledad, dependemos de otros seres para sobrevivir y construir, por lo que el sexo representa una unión importante en la que se demuestra afecto, interés, atracción y respeto por el otro.
En su libro, Randall expone cuatro motivos por los que las personas no pueden vivir sin sexo, y no se trata de la reproducción ni el placer.
1. Satisfacer nuestra necesidad de ser parte de algo.
Esto quiere decir que al intimar sexualmente con alguien más estás creando un pequeño grupo en el cual encajas perfectamente, te sientes cómodo y deseado.
2. Te conviertes en un centro de atención.
No hay mejor momento para sentirse pleno y dejarse llevar que durante una relación sexual. La sensación liberadora que brinda el sexo es incomparable.
3. Brinda estimulación emocional y sexual.
Además de que se siente muy bien, es una manera perfecta para levantar la autoestima y el ánimo. También se mezclan emociones como amor, atracción, pasión y protección, sin importar si el encuentro es casual o con la pareja estable.
4. Es un momento exclusivo y privado.
Esta sensación de intimidad, de poder disfrutar sin tabús y de libertad absoluta no se puede tener bajo ninguna otra circunstancia.
De acuerdo con un artículo publicado por la Escuela de Medicina de Harvard, el sexo es una conexión social que puede brindar un bienestar general para las personas, impactando también en la sociedad.
“Las conexiones sociales como estas no sólo nos dan placer, también afectan nuestra salud a largo plazo en maneras tan poderosas como un sueño adecuado, una buena dieta y no fumar. Docenas de estudios han demostrado que las personas que tienen relaciones satisfactorias con su familia, amigos y comunidad son más felices, tienen menos problemas de salud y viven más tiempo”.
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