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Médicos le retiran cepillo de dientes que se tragó hace 20 años

Un hombre se tragó un cepillo dental en un intento de suicidio hace 20 años. Tuvo que ser removido de sus intestinos o podría haberlo matado por infección.

Un hombre en China fue intervenido en un quirófano para extraerle del intestino un cepillo de dientes, el cual se había tragado hace 20 años y que, si hubiera dejado más tiempo, habría llegado al hígado y lo habría matado.

El hombre de 51 años, conocido como Li, fue al hospital a finales de junio pasado para una exploración de rutina debido al dolor abdominal que presentaba.

Fue entonces que sorprendió a los médicos, quienes encontraron en el conducto billiar de su intestino delgado un cepillo de dientes, que el hombre había tragado hace dos décadas.

"Hace mucho que olvidé el cepillo de dientes, asumiendo que se había expulsado por sí solo", afirmó Li, de acuerdo con el portal NDTV.

Li contó a los médicos del Hospital Popular No. 3 de Shenzhen, en la provincia de Guangdong, China, que había ingerido dicho objeto hace 20 años en un intento de suicidio, cuando estaba en prisión. 

El hombre había contraído el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) a través del consumo de drogas. Sumado a su estadía en prisión, era una situación que había rebasado a Li, por lo que intentó quitarse la vida.

No obstante, tragarse el cepillo no pareció tener ningún efecto nocivo en Li, así que su intento de suicidio fracasó. De hecho, el artefacto no le causó ninguna molestia por años.

Poco tiempo después, el hombre dejó las drogas y comenzó el tratamiento contra el VIH. Más tarde, fue liberado de prisión y dio negativo en la prueba del virus. Li continuó con una vida normal, incluso se casó y ahora tiene dos hijos. 

Pero tras años de vivir con el artículo plástico en su abdomen, éste comenzó a causarle dolor abdominal e inflamación en la vesícula biliar desde 2014.

Cómo sacar un cepillo de dientes del intestino

Después de la exploración de rutina, los médicos de Shenzhen, ordenaron a Li una tomografía computarizada y fue cuando dieron con el cepillo de dientes de 14 centímetros de largo en su intestino delgado.

Los cirujanos de Li utilizaron un endoscopio para extraer el cepillo dental, el cual, después de 20 años en el sistema digestivo del hombre, había sufrido considerables cambios, se había degradado, ennegrecido y las cerdas habían sido digeridas por el ácido gástrico.

Según los expertos que atendieron a Li, si el hombre no se hubiera sometido al procedimiento para extraer el cepillo, probablemente habría sido mortal.

"El cepillo de dientes pudo haber permanecido en el estómago y el duodeno durante muchos años antes de pegarse en el conducto biliar, causando inflamación y dolor", explicó el cirujano Liu Jialin, quien atendió a Li.

El cepillo dental podría haber provocado una infección que le habría causado la muerte a Li. "Si no se trata, podría haber tocado el hígado y provocado una infección mortal", aseguró el especialista.

No es el primer caso de este tipo ni el más extraño

En marzo de 2016, se dio a conocer el caso de un paciente no identificado al que se le extrajeron 18 cepillos de dientes del estómago y otros objetos extraños en una operación en Kuwait, según Daily Mail.

A diferencia del intento de suicidio de Li, según los expertos, este tipo de casos sólo se han visto en pacientes con un trastorno mental conocido como Pica, en el cual las personas sienten apetito por objetos que no son comestibles.

El paciente de 2016 también había ingerido un par de pinzas de metal, un pedazo de cuerda y un sacacorchos plegable.

Por increíble que parezca, un cepillo de dientes es fácil de tragar, afirmó a Daily Mail el doctor Anton Emmanuel, consultor gastroenterólogo de los Hospitales University College de Londres y portavoz de la Sociedad Británica de Gastroenterología.

Esto, debido a sus bordes redondeados que pueden deslizarse fácilmente por el esófago sin atascarse, a diferencia de otros objetos como monedas o bloques de lego, comunes para los niños, según el experto.

Sin embargo, una vez en el estómago, estos objetos no pueden pasar a través de la válvula que conduce al intestino, así que comienza a bloquearlo. "Se atasca y detiene la función del estómago. Todo el ácido del estómago y la saliva no se pueden drenar", explicó.

"El paciente se sentirá muy enfermo, con náuseas, con dolor de estómago y comenzará a vomitar. Es entonces cuando se presentan en el hospital con algo gracioso en la radiografía del estómago", detalló Emmanuel.

No obstante, además de ser una anécdota médica, esto puede llegar a ser una emergencia potencialmente mortal, si al estómago llega un objeto que pueda perforarlo.

"Si el estómago se perfora puede explotar. Si el intestino se perfora, obtienes peritonitis, donde el contenido del intestino se filtra hacia el cuerpo, lo que te pone muy enfermo, ya que hay muchas bacterias que pueden causar infección", dijo el especialista.

La peritonitis es uno de los riesgos que corren las personas que llegan a desarrollar una úlcera en el estómago o la boca del intestino, pues también suelen perforarse, tal como le ocurrió a Gabriel Soto, cuya úlcera duodenal casi le cuesta la vida.

"Hay un 60 % de fatalidad con esto", afirmó Emmanuel. Por lo que, tras la operación, en el caso de los pacientes con Pica, ellos son remitidos a un hospital psiquiátrico para recibir tratamiento y evitar que pongan en peligro su vida.

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