Ashley Robinson, residente de Wisconsin de 21 años de edad, perdió su cabello luego de usar un acondicionador mezclado con crema para depilar adquirido en un Walmart de su localidad.
El caso de Ashley se hizo viral gracias a que la mujer compartió su historia a través de su perfil de Facebook, y les mostró a sus seguidores su desafortunada historia.
"Mientras las sacaba de mi pelo, mis manos estaban llenas con mi cabello y seguía cayéndose", relata con pesar y sorpresa la joven en su perfil de Facebook.
Al ver que el cabello se le caía de manera anormal, Ashley acudió a una sala de emergencias para descartar que tuviese algún daño como quemaduras u otro mal.
"Fui a la sala de emergencias para asegurarme de que no hubiera quemaduras químicas, afortunadamente sólo en algunos lugares estaba rojo e irritado, pero parecía estar bien mi cuero cabelludo”, escribió la joven.
La traumática situación ocurrió un domingo cualquiera en el que Ashley decidió tomar una ducha y lavar su cabello con shampoo y acondicionador.
"No piensas revisar tu shampoo o acondicionador una vez que lo compras; bueno, esta noche eso cambió para mí”, comenzó así la joven su relato.
Al usar el acondicionador ella dijo que notó que "no olía muy bien"; sin embargo, no le prestó importancia y siguió con el procedimiento común.
Luego de notar que el cabello se le caía y de acudir a emergencias, Ashley percibió que se seguía cayendo, por lo que decidió raparse, pues le quedaban huecos en la cabellera.
Este episodio le causó a la afectada mucha ansiedad por el miedo a presentarse en público sin pelo, y temía volver a su trabajo.
"Mañana vuelvo al trabajo y estoy muy ansiosa, mis emociones nunca habían sido tan intensas", escribió en otra publicación en su perfil de Facebook.
El caso de Ashley llamó la atención de la cadena Walmart y de la policía del estado de Wisconsin, quienes están investigando una posible alteración del producto dentro del local del supermercado.
Según reporta NBC Chicago, la policía de New Richmond dijo en un comunicado de prensa que "la manipulación del producto (product tampering) puede ser un delito grave y se cita en el Estatuto del Estado de Wisconsin 941.327".
Y la policía añadió que "debido a la importancia de este delito, los oficiales y detectives de New Richmond han estado trabajando con el personal de Walmart para identificar posibles sospechosos y revisar la videovigilancia".
Por su parte, la cadena de supermercados Walmart afirmó que según sus revisiones de videovigilancia y demás protocolos no se encontraron signos de alteración del producto mientras estaba en la tienda.
Mediante un comunicado de prensa, citado por CBS Minnesota, la compañía dijo tomarse en serio reclamos de ese tipo. Además añadió:
"Tan pronto como nos enteramos del problema, inspeccionamos todos los productos en nuestra tienda, revisamos las imágenes de vigilancia y no encontramos evidencia de manipulación".
Además, la cadena de supermercados mencionó que han intentado comunicarse con Ashley Robinson, pero que no han recibido respuesta.
"Intentamos comunicarnos con el cliente para discutir esto más a fondo y no hemos recibido respuesta. Continuaremos trabajando con las autoridades para procesar si hay evidencia comprobada de manipulación".
La situación ha abrumado a la joven de veintiún años, por lo que ha dicho en su perfil de Facebook que no hablará más del asunto por salud mental, pues no puede manejar comentarios negativos.
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