IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

Evita el abuso sexual infantil con el “círculo de las caricias”

Las caricias no son malas, pero los niños deben aprender a identificar qué personas pueden darles un beso o abrazo y quiénes deben mantener su distancia.

El abuso sexual infantil es posible de evitar y son los niños quienes pueden aprender a reconocer situaciones de riegos y advertir a sus padres o tutores sobre algún escenario incómodo, antes de que el delito ocurra.

De acuerdo con datos de UNICEF, una de cada tres mujeres y uno de cada 13 hombres sufrieron algún tipo de abuso sexual en la infancia, desde acoso, tocamientos, hasta violación.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), indica que México tiene el primer lugar de víctimas de abuso sexual infantil, con más de cuatro millones de menores violentados cada año, sin embargo, esta cifra está lejos de la realidad ya que solo uno de cada 100 casos es reportado ante las autoridades.

¿Qué es el abuso sexual infantil?

Cuando se habla de abuso sexual a menores el término es muy amplio y no solo se limita a la perpetración del coito.

Observar a un niño desnudo en contra de su voluntad o con fines sexuales, grabarlo y tomarle fotos para la obtención de pornografía infantil también es un delito.

Hacer tocamientos de su zona genital, pechos o cualquier parte de su cuerpo por encima o debajo de la ropa. Tener contacto genital con el menor, con o sin penetración.

El contacto oral del menor o adulto con las zonas genitales y por supuesto, la penetración con cualquier objeto es un delito sexual.

Guadalupa Azuara, psicóloga experta en violencia intrafamiliar explicó a BBMundo por qué los niños son tan vulnerables ante este tipo de abuso:

“Los niños que son abusados sexualmente son inocentes y piensan que ningún adulto, mucho menos un familiar o amigo, podría hacerles daño. Pero la realidad es que ocho de cada diez abusadores son conocidos de la familia”.

La especialista indicó que los menores están en desventaja cuando no se les enseña en casa a reconocer las partes de su cuerpo y se les llama a sus miembros genitales por otros nombres. También, puntualizó que, de acuerdo con su edad, hay que explicarles para qué sirven y por qué nadie debe tocarlos.

Mira también: 8 claves para descubrir un abuso sexual en la familia como lo hizo esta madre

Aplica el “círculo de las caricias”

Azuara explicó al medio citado que una técnica sencilla y clara para que los pequeños aprendan a protegerse es el “círculo de las caricias”.

Esta técnica consiste en colocar una foto del menor en una cartulina y dibujar círculos que lo rodeen, dentro del primero de ellos, el más cercano, debe estar la foto de mamá y papá. Junto a las fotos se debe escribir qué tipo de caricias y mimos están permitidos entre ellos, por ejemplo, los padres pueden bañarlos, verlos sin ropa, ayudarles a limpiarse cuando han hecho del baño, abrazarlos y darles besos.

En un segundo círculo deben estar los hermanos y estos pueden abrazarlos de manera cariñosa, darles un beso y tal vez verlos desnudos.

En otro círculo más lejano estarían los abuelos, aunque en muchas ocasiones pueden estar en el primer círculo ya que ellos son los cuidadores principales.

En círculos más lejanos irían los tíos y primos, ellos solo pueden darles un abrazo y beso fraternal, pero no pueden verlos desnudos o tocarlos si no está papá o mamá presentes.

Los círculos cada vez se hacen más grandes y lejanos, y mientras haya más distancia entre la foto del niño y las de las personas, por ejemplo, maestros o amigos de la familia, menos contacto físico debe haber entre ellos.

El “círculo de las caricias” ayuda a los menores a observar de manera gráfica quiénes son las personas en las que pueden confiar y con las cuales están permitidas las muestras de cariño y quienes definitivamente deben mantener su distancia.

Las fotos de la cartulina pueden ir cambiando de lugar, por ejemplo, cuando mamá y papá se divorcian y existe alguna orden de restricción, el padre que no vive con el niño puede pasar a otro circulo más lejano.

De la cartulina también deben ir desapareciendo maestros que ya no forman parte de la vida del niño, amigos o algún familiar con el que se pierda contacto.

“Las caricias no son malas, solo hay que enseñarle al pequeño quiénes pueden tocarlo y de qué manera, y cuando una persona invada otro círculo que no es el que le corresponde tiene que decirle a sus padres o tutores”, señala la especialista.

Mira también:

Rosie Rivera confiesa cómo el abuso sexual perjudicó su matrimonio

Protege a tus hijos del abuso sexual enseñándoles a nombrar sus partes íntimas de manera correcta

VIDEO: Las huellas que dejan los padres violentos en los hijos