Luis Miguel no se ha caracterizado por ser el mejor padre para sus hijos. Aracely Arámbula reveló que sus hijos están por celebrar la primera comunión y "El Sol" está cordialmente invitado.
La relación que el cantante ha tenido con sus hijos no ha sido la de un padre ejemplar. Más bien, ha faltado a muchos eventos relevantes en la vida de Michelle Salas, Miguel Gallego y Daniel Gallego.
Por ello, te presentamos 10 puntos donde podría decirse que "Luismi" ha fallado como papá, pero que nos pueden orientar para aprender a ser buenos padres.
1. No hacerse cargo de sus problemas emocionales y los reproduce como padre
Podría pensarse que cuando alguien como Luis Miguel se convierte en padre, todos los conflictos internos desaparecen.
Sin embargo, los problemas no resueltos seguirán ahí y se reproducirán en el rol de padre. Por eso, si se quiere ser buen papá, hay que resolver los propios conflictos.
Como vimos en la bioserie "Luis Miguel", transmitida por Telemundo, "El Sol" creció en un difícil ambiente familiar.
Celos, maltrato, explotación, y demás situaciones que pudimos ver explican varios de los problemas emocionales del famoso cantante.
Las fallas de "Luismi" como padre, probablemente se deban a esos conflictos de su infancia no resueltos con ayuda de un profesional.
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2. Manutención de los hijos
En 2013, Aracely Arámbula demandó a Luis Miguel para exigirle al cantante que cubra la pensión alimenticia para sus hijos Miguel y Daniel.
Éste es una de las fallas más importantes que un padre puede tener con sus hijos, no hacerse cargo de los gastos de manutención.
Puede ser que los papás estén separados o que tengan diferencias, pero los hijos no tienen la culpa de ello y merecen lo mejor, y un buen padre lo sabe y lo hace.
3. Pasar buen tiempo con ellos
"Luis Miguel 'tiene las puertas abiertas, los puede ver cuando él quiera'", declaró la actriz Aracely Arámbula a la revista People en Español en febrero de 2013.
Estas palabras denotan poco tiempo de convivencia entre el cantante y sus hijos, independientemente de los compromisos laborales.
Un buen padre siempre busca tiempo para convivir con sus hijos pequeños. No importando los obstáculos, el estar presente es esencial para una buena relación.
4. Relación distante
"Quisiera que él tuviera una relación más cercana con los niños", mencionó Aracely en la misma entrevista con People en Español.
Una relación cercana significa pasar tiempo de calidad con los hijos, escucharlos, conocerlos y, sobre todo, darles afecto para que desarrollen una personalidad sólida.
5. Sobreprotección
Los rostros de los hijos de Luis Miguel y Aracely Arámbula no son muy conocidos más que por imágenes publicadas en revistas.
Esto es por decisión de sus padres, algo que podría leerse como sobreprotección. Sin embargo, tener papás famosos no debe ser fácil para los pequeños.
No obstante, muchos papás tienden a sobreproteger a sus hijos para que ellos no sufran lo mismo que ellos sufrieron, y a la larga, esto resulta contraproducente.
Un buen papá les enseña el mundo a sus hijos y les da herramientas para vivir en él. Apartarlos del mundo hará que probablemente les sea más difícil lidiar con los problemas cotidianos.
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6. Mantener la paternidad oculta
No reconocer públicamente la paternidad, aunque haya contacto con los hijos, puede acarrear conflictos emocionales en los niños.
El 13 de junio de 1989 nació Michelle Salas, primera hija de Luis Miguel, cuando el cantante tenía 19 años y acababa de lanzar su exitoso álbum "Busca una mujer".
"Mickey", en ese entonces, no reconoció su paternidad, aunque sí veía a su hija. "Dejé de verlo como a los seis años", dijo Michelle a la revista Quién en 2005.
No fue sino hasta 2008 cuando Luis Miguel reconoció legalmente a Michelle Salas como su hija.
No se saben las razones que tuvo "El Sol" para no reconocer a su primogénita en ese entonces, pero, fue una falla como padre.
7. Falta de comunicación con los hijos adolescentes
La falta de comunicación de un padre con una hija adolescente desencadena problemas. Un buen papá habla con sus hijos, aunque no viva con ellos.
Michelle Salas declaró en la misma entrevista para Quién diciembre de 2005: "solo quiero que me dé cinco minutos para que me explique sus razones. Que me diga qué pasó y ¡ya!".
En ese entonces Michelle tenía 16 años y estaba en búsqueda de respuestas, como cualquier adolescente. Como papá es bueno conversar con los hijos en esa edad.
8. Cuestionar las decisiones de los hijos adultos
En 2008, el periódico El Centro publicó fotos de Michelle Salas y Alejandro Asensi, representante de Luis Miguel, en actitud cariñosa.
En esa misma nota, se mostraron unos correos electrónicos donde Michelle decía estar enamorada de Asensi.
¿El resultado? Luis Miguel terminó su relación laboral con Asensi y se volvió a distanciar de su hija Michelle.
Un buen padre sigue cerca de sus hijos adultos a pesar de que sus decisiones no sean las que le agraden a él.
9. Hablar mal públicamente de la madre de sus hijos
En la bioserie "Luis Miguel", supervisada por el cantante, se presentó al personaje de Stephanie Salas como una persona entrometida e infiel.
Además, se dio a entender ahí que Michelle fue producto de una noche de pasión entre "El Sol" y Stephanie Salas.
Aunque Stephanie y Michelle no han querido hacer declaraciones al respecto, un buen padre no exhibe a la mamá de sus hijos de esa manera.
10. No reconocer los errores
Hasta ahora, no se sabe que Luis Miguel haya reconocido sus fallas como padre y tampoco ha pedido perdón por estar lejos de la vida de sus hijos.
Eso es algo que se debe hacer en privado, y un buen padre reconoce sus errores y busca enmendarlos. Eso ayuda al buen desarrollo emocional de los hijos.
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