Tomar una bebida refrescante con unos cubitos de hielo o completamente helada parece delicioso, sin embargo, puede resultar en un problema para el organismo y su funcionamiento.
De acuerdo con Clínica Nasser, hasta ahora no hay una prueba contundente de que se deben evitar este tipo de bebidas, pero lo cierto es que existen ciertos momentos en los que es mejor ingerir los líquidos con una temperatura tibia.
El organismo humano se encuentra generalmente a una temperatura aproximada de 37 grados, por lo que al tomar bebidas o alimentos fríos o congelados se contraen los vasos sanguíneos para volver a la normalidad.
Los especialistas indican que a pesar de que beber un vaso de agua fría puede brindar la sensación de frescura y mayor vitalidad, los beneficios de hacerlo son mínimos en comparación con la descompensación que se provoca en el cuerpo.
El peor momento para tomar un vaso de agua fría es luego de la comida ya que dificulta de digestión pues la energía se enfoca en templar el cuerpo y no es procesar los alimentos.
Otro efecto de las bebidas frías después de comer es que aumenta la producción de mucosidad y disminuye la función inmunológica, lo que hace más posible contraer un resfriado.
Según el diario La Vanguarida, las bebidas frías también favorecen la aparición de dolores de cabeza y migraña. Al disminuir la temperatura corporal, los nervios de la espina dorsal recienten el cambio y envían señales al cerebro para que regule el calor del organismo y esto genera la jaqueca.
Además, si gustas de tomar bebidas frías todo el tiempo puede que te sea más difícil perder peso pues al pasar por el organismo solidifican las grasas y se adhieren a los intestinos, lo que también provoca estreñimiento.
El caso de Luidwin Flores Nole
Semanas atrás la noticia de la muerte del jugador amateur del Club Los Rangers, Luidwin Flores Nole, tras beber un vaso de agua fría luego de haber hecho deporte generó gran impacto.
De acuerdo el sitio ABC, su esposa contó a una televisora local que Luidwin llegó a casa después de entrenar con sus amigos y decidió hidratarse, por lo que se dirigió al refrigerador y tomó un vaso de agua helada. Al poco tiempo comenzó a sentirse mal.
"Poco después se puso mal con dolor de pecho, lo llevamos a una clínica, pero falleció en el trayecto", señaló la mujer. Y añadió: "el médico nos dijo que había sufrido de un paro respiratorio fulminante debido a que tomó agua demasiado fría mientras el cuerpo se encontraba caliente".
¿Qué pasa con el agua tibia o caliente?
El efecto de las bebidas tibias o calientes en el organismo es todo lo contrario. Cuando el agua que se ingiere está en una temperatura alta o tibia permite que las grasas fluyan con facilidad por el tracto digestivo.
La digestión se ve favorecida porque estimula las enzimas que la hacen posible, también los alimentos se desintegran más rápido. Como si fuera poco estimula el movimiento intestinal, purifica la sangre y mejora el proceso natural de desintoxicación, es bueno para los riñones y el sistema linfático.
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