Hannah Lester siempre fue considerada por su familia y amigos como la “gordita” algo que odiaba desde que era pequeña, pero nunca había tomado el valor de acabar con esa etiqueta perdiendo peso, hasta que una competencia en su trabajo la motivó.
La bibliotecaria de 31 años pesaba 285 libras, tenía una vida sedentaria y una alimentación pésima. Durante una época de su vida trabajó en un restaurante de comida rápida por lo que su dieta diaria consistía en hamburguesas, papas frita y bebidas gaseosas.
Lester se sentía atormentada por sus malos hábitos, pero no encontraba la motivación necesaria para poner un alto y transformarse.
“Recogía comida rápida camino a clases. Realmente se convirtió en mi hábito… No tomé decisiones muy saludables. Estaba demasiado perezosa”, relató la mujer originaria de Puxico, Missouri, a TODAY.
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Cuando se enteró de que en su trabajo iniciarían un reto de pérdida de peso supo que era su oportunidad para cambiar su estilo de vida y ponerse en forma, así lo expresó Lester al medio citado: “Me dio una razón para perder peso, quería probarme a mí misma que podía hacerlo”.
Hannah se puso la meta de bajar 35 libras de enero a mayo y su sorpresa fue que para marzo ya había alcanzado su objetivo. Se dio cuenta de que, al evitar las comidas poco saludables, reducir su consumo de gaseosas de 6 por día a una sola, comenzar a tomar agua y caminar podría llegar más lejos.
Sin duda, la historia de Hannah es un ejemplo para otras personas que al igual que ella luchan con su peso ya sea por motivos de salud y simple vanidad.
Estos son los 4 pasos que Lester plantea para alcanzar tus metas y reducir unas libras:
1. No tires tu ropa del pasado
Si ya has bajado algunas libras, no eches a la basura la ropa que usaban antes ya que te servirá de motivación para no volver a subir de peso. Cuando veas que tan grande eran tus jeans, sentirás que no quieres volver a tu imagen pasada.
2. Olvídate de la báscula
El peor enemigo para la pérdida de peso es la báscula ya que no refleja la realidad de tus logros, pues en algunas ocasiones se reduce talla y no peso. Además, si tu pérdida de peso se refleja en la báscula podrías sabotear tu progreso.
3. Establece metas razonables
No quieras perder 20 libras en una semana. Da pequeños pasos, comienza con algunas libras por mes, ajusta de nuevo tu dieta y rutina y ve por más, siempre de manera saludable.
4. Haz lo que mejor se ajuste a ti
Si a tu vecina le funcionó una dieta, pueda que a ti no. Lester explicó que ella intentó la dieta libre de carbohidratos, pero no le funcionó. Lo más recomendable es visitar un nutriólogo para conseguir un régimen alimenticio que vaya contigo.
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