Eli Gregg es un caso que no se ve todos los días: el joven de 15 años se clavó un cuchillo de 10 pulgadas en la cara y, pese a que los doctores pensaron que moriría, pues pudo alcanzar su cerebro y provocar una hemorragia, sobrevivió.
Los doctores dicen que es extremadamente afortunado. Jimmy Russell, la madre de Eli dijo que estaba jugando el jueves por la noche afuera de su casa en Redfield, a unas 90 millas al sur de Kansas City, cuando lo escuchó gritar.
La madre lo encontró con un cuchillo de 10 pulgadas que sobresalía justo debajo de su ojo y llamó al 911. "Parecía bastante sombrío, daba miedo", dijo Russell en un video publicado por el Sistema de Salud de la Universidad de Kansas, donde el adolescente recibió tratamiento.
El cuchillo estaba incrustado en su cráneo y extendido justo debajo de su cerebro. La punta de la hoja, mientras tanto, estaba empujando contra su arteria carótida, que suministra sangre al cerebro.
El cuchillo estaba incrustado en el cráneo de Eli y se había extendido justo debajo de su cerebro. La punta de la hoja, mientras tanto, estaba empujando contra su arteria carótida, que suministra sangre al cerebro.
"Podría haber tenido una libra más de fuerza sobre el cuchillo y él no habría sobrevivido a ese evento", dijo el doctor Koji Ebersole, quien supervisó la extracción.
Foto: Sistema de Salud de la Universidad de Kansas/AP/Today.com
"No creo que hubiera sobrevivido a eso", recalcó el médico, quien es director de neurocirugía endovascular del Sistema de Salud de la Universidad de Kansas.
Un equipo de cirujanos elaboró un intrincado plan para retirar el cuchillo el viernes por la mañana. Estaban preparados para una posible hemorragia en el cerebro, pero la operación se realizó sin problemas y la arteria permaneció intacta.
Las impactantes imágenes de rayos X, proporcionadas por el Sistema de Salud de la Universidad de Kansas, muestran el cráneo de Eli con el cuchillo incrustado.
Foto: Sistema de Salud de la Universidad de Kansas/AP/Today.com
A las 24 horas de la cirugía, Eli pudo hablar y aclarar la situación. Según lo programado, debía ser dado de alta el lunes. "Dice que se mantendrá alejado de los objetos afilados. Eso es muy comprensible", dijo la madre del joven.
Ella detalló que a Eli le está yendo bien y que debería recuperarse por completo de la lesión. "Es casi un milagro", dijo Russell. "Es realmente increíble", aseguró. El chico de 15 años ya se está recuperando a unos días del accidente y los médicos esperan que no haya secuelas.
Eli fue aún más afortunado al tener al doctor correcto
El niño fue más suertudo aún porque terminó en las manos del doctor Ebersole, quien ya tenía experiencia en estos casos, por increíble que parezca.
Ebersole fue quien sacó un pincho de carne del cráneo de un niño de 10 años en Missouri el año pasado, en un accidente que proporcionó radiografías igualmente impactantes.
Foto: Shannon Miller/Today.com
Xavier Cunningham estaba jugando en su casa del árbol con un amigo cuando un enjambre de chaquetas amarillas comenzó a picarlos. Mientras intentaban escapar, el niño se cayó de la casa del árbol y aterrizó en un pincho de metal para carne de un pie de largo.
"El pincho esquivó todas las estructuras críticas. Fue increíble que pasara a la profundidad a la que lo hizo y no golpeara nada crítico. Se salvó el ojo, se salvó el cerebro, se salvó la columna vertebral", dijo Ebersole en ese momento a Today.
En cuanto el doctor lo vio, supo que era un caso único. "Estaba completamente despierto, y se estaba moviendo y hablando", dijo Ebersole. "Pero estábamos preocupados por los vasos sanguíneos", afirmó el experto.
Foto: Shannon Miller/Today.com
Cunningham pudo haber sufrido una hemorragia masiva, tenido un derrame cerebral o perder alguno de sus órganos, pues además la punta del pincho podría haber dañado todo al salir. Pero la extracción también fue exitosa y Xavier sólo quedó con una vendita en la cara.
Ya en casa, volvió a jugar con su perro y sus videojuegos. "Anoche tuvo los ojos llorosos. Dijo: 'Sé que todos están diciendo que yo era fuerte, pero tenía miedo'", contó su madre a Today. "Fue un gran soldado", afirmó.
No son los únicos casos asombrosos en los que un niño se salva de morir tras una lesión mortal con un cuchillo, esto también ocurrió en México, donde un niño de siete años clavó un cuchillo en el cráneo a su hermanito de 5 años. Afortunadamente, sobrevivió.
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