A principios de 2018, Emily Foreman encontró un grano detrás de su oreja que ignoró hasta que creció al doble de su tamaño. Al analizarlo, su médico descubrió que era un carcinoma indiferenciado de células grandes, que no tiene cura y se propagó a sus pulmones.
Foreman, quien es educadora en un jardín de niños, notó por primera vez el grano tras su oreja a principios del año pasado y no le prestó atención, pero, en unos meses, el bulto duplicó su tamaño por lo que acudió con los expertos para analizarlo.
"Se confirmó que tenía un tumor canceroso; conocido como un carcinoma indiferenciado de células grandes ubicado en mi glándula parótida: esta es la glándula salival principal", contó Foreman a través de su página página en el sitio Give a Little.
El carcinoma es el tipo de tumor maligno más frecuente que se forma en las primeras capas de la piel o en las células superficiales de los órganos y los hay de muchos tipos, entre ellos, el que sufrió Edith González y hasta el cáncer de piel que han padecido muchos famosos.
Los doctores también descubrieron que el cáncer de Emily se había diseminado a algunos de los ganglios linfáticos circundantes, por lo que tuvo una operación de seis horas para extirpar la glándula salival, la mayoría de sus ganglios linfáticos y parte del tejido de su cuello.
Tras la operación, Foreman quedó con un lado del rostro paralizado, ya que los cirujanos también debieron tomar parte de su nervio facial principal, pero la joven pensó que estaba en camino de recuperarse.
Su cáncer regresó y se propagó
Luego de un tratamiento de seis semanas de radiación, Emily volvió a retomar su vida normal. "Las cosas volvieron a ser como solían ser y pude hacer algunos planes para mi futuro e intentar dejar atrás todo este problema del cáncer", contó.
Pero en febrero pasado, cuando Foreman organizaba su fiesta de cumpleaños, y tras una revisión de rutina y una tomografía computarizada, recibió una terrible noticia: el cáncer se había propagado con múltiples lesiones en sus dos pulmones.
"Siempre existía la posibilidad de que el cáncer regresara, pero nunca en un millón de años esperaba esto, o que sucediera tan pronto. Esto lo cambió todo", contó la joven, quien fue canalizada a un equipo de los mejores oncólogos, no obstante, no tenía muchas opciones.
"Debido a que las lesiones eran tan pequeñas y diseminadas en ambos pulmones, la cirugía no era una opción. Tampoco pudimos hacer radiación, ya que esto dañaría demasiado mis pulmones", relató la joven.
Tras someterse a observación durante varias semanas para ver cómo evolucionaba su cáncer, su oncólogo le dio otra noticia desgarradora. "Él dijo: 'Emily, no creo que pueda curarte'", contó Sarah Foreman, la madre de la joven, al sitio Stuff.
"No saben muy bien qué harán los tumores en sus pulmones, saben que no van a desaparecer por sí solos", dijo la madre de la joven. Por suerte, tras mantenerse en observación, su doctor descubrió que su sistema inmunológico estaba luchando contra la enfermedad.
La inmunoterapia, su única opción
El médico sugirió a Emily someterse a inmunoterapia, la cual ayuda al sistema inmunológico a encontrar y atacar la enfermedad. Es una terapia biológica compuesta de sustancias producidas por el cuerpo para tratar este mal.
Luego de un análisis, descubrieron que la joven era apta para este tratamiento. Pero Foreman tendrá que enfrentarse a un obstáculo más: el costo de cada tratamiento de inmunoterapia es de 6,000 dólares, deberá realizarse al menos 10 y su seguro médico no lo cubre.
"Si mi cuerpo responde bien a la inmunoterapia, entonces esto es algo que podemos hacer indefinidamente. Esto significa que podríamos estar haciendo esto durante mucho tiempo, posiblemente, incluso años", contó, por lo que ha creado la página de donaciones para financiarlo.
Además, aunque ahora es la mejor opción para Emily, esto no la librará del cáncer. "La inmunoterapia no es una cura, y no me curará; Actualmente, no hay cura. Pero debería ser capaz de evitar que las lesiones crezcan y mantenerlas a raya el mayor tiempo posible", dijo.
Una esperanza para Emily
"La medicina está cambiando todo el tiempo y tengo la esperanza de que algún día habrá una cura, pero actualmente esta es mi mejor oportunidad de mantener a raya al cáncer hasta que se encuentre esa cura", detalló la joven.
"Como dije al comienzo de este viaje y muchas veces, soy demasiado positiva para ser dudosa, demasiado optimista para ser temerosa y demasiado determinada para ser derrotada", afirma la joven en su página de donaciones.
Pero el cáncer de Emily ha avanzado más rápido de lo que sus médicos esperaban en su última revisión, a inicios de junio. "La tomografía computarizada mostró que las lesiones en realidad habían cambiado y han comenzado a crecer", contó.
"Debido a esto, vamos a necesitar comenzar la inmunoterapia antes de lo que pensábamos", dijo la joven. "Afortunadamente, esto es algo que podremos hacer debido a todas las generosas donaciones que hemos recibido en las últimas semanas", afirmó.
"Nosotros, como familia, estamos verdaderamente agradecidos por el apoyo y la generosidad de todos. Significa el mundo para nosotros, así que muchas gracias a todos los que han hecho su parte para apoyarme en este viaje", dijo Emily.
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