Hay etapas en nuestra vida de las que ni nuestra familia, ni los amigos, ni internet nos enseñan o advierten y esas son: tener hijos, formar una familia, vivir en pareja o solo.
Tener hijos
Ser papá primerizo implica un sinnúmero de experiencias que al principio son difíciles de sobrellevar, pero que después pueden ser enriquecedoras y hasta anecdóticas.
Diego Martínez, un joven que se acaba de convertir en padre señala a Pulzo que el hipo, el pujo y los gases serán tus nuevos enemigos, por lo que, recomienda que, si no logras sacarle los gases a tu bebé, lo único que debes hacer es darle palmaditas en su espalda y colocar un babero sobre tu hombro o pecho para evitar que te ensucie en caso de que le dé reflujo.
Asimismo, recomienda que las mujeres lactantes beban infusión de hinojo, pues según el sitio Fuentes Saludables, sirve para producir mayor cantidad de leche, gracias a los flavonoides que contiene.
Su preparación es muy fácil, solo debes poner a hervir una taza de agua y cuando esté en hervor, añadir una cucharadita de semillas de hinojo. Déjala por dos minutos en el fuego y después permite reposar por 10 minutos. Cuela y sirve.
Lo aconsejable es tomarla dos veces al día media hora antes de los alimentos.
Tener una familia
Formar una familia es olvidarte de tu soltería, según Mónica Toro, una mujer con dos hijos, Guadalupe, de 6 años y Salomón, de dos.
Para ella, la familia es el mejor trofeo de la vida, e incluso la joya más vendida de las ferias de libros, porque incluye todos los géneros: drama, comedia, acción, suspenso y hasta terror.
Además, en este nuevo ciclo de vida, dejas de ser tu prioridad, ya que haces a un lado esas largas horas de baño para estar al pendiente de lo que tus pequeños deseen.
Dejar los niños en el colegio, bañarlos, darles el desayuno, lavarles los dientes, dejar las camas tendidas, son algunas de las tareas de las que nadie te advierte y te hubiese gustado escuchar.
Tener una familia es como estar en una montaña rusa real, hay días que enfurecen, pero noches que reconfortan, pues hay ocasiones que abres los ojos y te das cuenta que el amor nunca desaparece.
Vivir en pareja
Para Javier Riveros, un joven que decidió vivir con su pareja, dormir abrazando a la persona que amas no se compara con abrazar una almohada.
El tener con quien hablar al terminar el día, es una de las mejores cosas que existen, pero lo que nadie te advierte es que tanta dicha tiene un precio, y si no se manejan bien las finanzas, lo más probable es que te sobre mes al final del sueldo.
De acuerdo con Fucsia, lo realmente importante es asegurarse de que ambos estén conformes con el acuerdo al que lleguen sobre cómo repartirán los gastos.
Vivir solo
Muchas veces, la mayoría de las personas no está consciente de algunas cosas que vienen de la mano cuando uno decide dar este paso, por ejemplo:
1 Enfrentas la soledad: aunque tus papás te parecieran 'regañones', extrañarás contarle a alguien tus aventuras o problemas, pues ahora ya no tendrás con quien platicar físicamente.
2 Tendrás que adaptarte a las tareas del hogar: como planchar, cocinar, barrer, etc.
3 Todos los servicios básicos tienen fecha de vencimiento: no dejes que se te acumulen, ya que la suma total de esas cuentas pendientes podría dejarte sin quincena.
4 La comida tiene fecha de caducidad: procura comprar solo lo que te vas a comer. O bien, congélala para que no se eche a perder.
5 Saber utilizar la lavadora es indispensable si no quieres arruinar tu ropa: revisar que no se vaya ninguna prenda de color en tu ropa blanca o no lavar prendas color negro después de las toallas o quedarán llenas de pelusas, es una de las cosas que nadie te dice sobre vivir solo.
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