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8 señales que revelan una apendicitis como la que sufrió Eva Longoria

Eva Longoria fue operada de urgencia tras sufrir una apendicitis. Aquí te explicamos qué es y las 8 señales que te ayudarán a detectarla.

Eva Longoria tuvo que ser operada de urgencias en Cannes luego de que sufriera un fuerte dolor estomacal que se le extendió por el abdomen y que terminó siendo una apendicitis. Pero, ¿en qué consiste esta afección y qué señales te ayudan a detectarla? Aquí te lo decimos.

De acuerdo con Mayo Clinic, la apendicitis es una inflamación del apéndice - pequeño órgano que se encuentra unido al intestino grueso- y provoca dolor en el abdomen bajo derecho.

Aunque en la mayoría de las personas, el dolor comienza alrededor del ombligo y luego se desplaza y, a medida que la inflamación empeora, el dolor por lo general incrementa y finalmente se hace intenso.

Cualquier persona puede tenerla, pero lo más frecuente es que ocurra en personas entre los 10 y 30 años de edad.

El tratamiento estándar es la extirpación quirúrgica del apéndice, tal como le sucedió a la actriz, quien presentó dolor abdominal dos días antes de presentarse en el Palacio de los Festivales, según la revista Closer.

Debido a esto, es importante estar al tanto de las siguientes señales que son determinantes para consultar a un especialista y recibir un diagnóstico oportuno.

1. Distensión abdominal: se caracteriza por ser una molesta sensación de presión e hinchazón en el abdomen, casi siempre asociada a una dificultad digestiva. Es uno de los principales síntomas, ya que se desencadena una reacción inflamatoria que se va extendiendo por todo el sistema digestivo.

2. Dolor en la parte inferior derecha del abdomen: puede ser intermitente, aunque suele permanecer por un tiempo prolongado.

Este dolor aumenta al estornudar o hacer un movimiento brusco.

3. Mareos y vómitos: cuando éstos aparecen de forma repentina es muy importante acudir al médico. Si bien no todos los casos indican esta enfermedad, pues podría confundirse con el hígado graso, es primordial considerar la posibilidad.

De acuerdo con Mejor con salud, alrededor del 90 % de los casos diagnosticados presentaron este síntoma después de percibir un fuerte dolor en la zona inferior abdominal.

4. Pérdida de apetito: la inapetencia es una de las consecuencias de la inflamación, pues la apendicitis interfiere en el buen funcionamiento digestivo y afecta a la segregación de las hormonas del hambre. Como consecuencia de esto, los pacientes tienden a tener complicaciones nutricionales.

5. Fiebre: los pacientes suelen experimentar fiebre y escalofríos junto con el dolor abdominal.

6. Estreñimiento o diarrea: aunque no son síntomas típicos de la apendicitis, pueden darse casos en los que se produzcan alteraciones en el tránsito intestinal. Mientras algunas personas sienten la urgencia de ir al baño constantemente, otros empiezan a ir con mayor dificultad.

7. Retención de gases: es muy probable que no puedas expulsar los gases, por lo que debes estar alerta, pues esto puede ser un signo de obstrucción intestinal.

8. Malestar en el cuerpo: algunas personas expresan sentir un cansancio fuera de lo normal y un malestar generalizado, según La Bioguía.

Si una persona presenta una o más de estas señales, es imprescindible visitar al médico. De lo contrario, podría desencadenar complicaciones graves, por ejemplo:

1. La perforación del apéndice: esto puede generar que la infección se esparza por el abdomen y puede poner en riesgo la vida del paciente. En este caso, será necesario hacer una cirugía de inmediato para extraer el apéndice y limpiar la cavidad abdominal.

2. Una acumulación de pus que se forma en el abdomen: si el apéndice revienta, es posible que se cree una acumulación de absceso. En la mayoría de las circunstancias, el cirujano drena el absceso introduciendo un tubo a través de la pared abdominal hasta él. Este tubo se deja colocado durante dos semanas y el paciente deberá tomar antibióticos para combatir la infección.

Una vez eliminada la infección, se hace una cirugía para extraer el apéndice.

Cómo prevenirla

1. Lleva una dieta rica en fibra: ésta facilitará el movimiento en el proceso digestivo. Entre los alimentos recomendables, se encuentran la mayoría de las frutas y verduras y, sobre todo, los cereales integrales.

2. Evita el estrés: mantener un descanso adecuado evitará que la enfermedad aparezca.

Recuerda que, ante cualquier malestar, duda o síntoma, debes buscar acudir con los profesionales.

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