La presencia de los padres en la vida de los hijos es fundamental para su desarrollo y para proporcionarles herramientas afectivas y sociales que les ayudarán en el futuro, sin embargo, en muchas ocasiones aunque los padres se encuentren vivos están criando huérfanos emocionales.
Estos niños se sienten solos y vacíos a pesar de contar con ambos padres, ya que pueden carecer de amor, atención, protección o tiempo. De acuerdo con el sitio BBMundo, la orfandad emocional puede traer repercusiones no solo en las relaciones que los hijos desarrollan posteriormente, sino también de salud.
Los huérfanos emocionales pueden tener una sensación de soledad al creer que no pueden contar con sus padres, además de que no tienen un sentido de pertenencia y seguridad, por lo que generan un vacío que suelen llenar con personas que no les convienen.
Cuando estas personas se convierten en adultas, pueden experimentar miedo, dolor irracional, ansiedad, depresión, temor a la soledad y al abandono. Además buscarán desesperadamente la aprobación de otras personas, haciendo lo que sea con tal de agradar a los demás y ser aceptados.
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La exclusión del padre, la madre o ambos en la vida de una persona podría llevar a padecer enfermedades provocadas por el resentimiento y la soledad, de acuerdo con el sitio.
Para evitar que nuestros hijos se conviertan en huérfanos emocionales, no basta con hacerse cargo de ellos materialmente, ni hablarles con palabras cariñosas, ya que el amor se tiene que demostrar de diferentes maneras.
Si los padres se separan, no se puede quitar el derecho al niño de convivir sanamente con su familia. El menor debe sentir que puede amar a ambos padres por igual, así como a sus respectivas familias.
Es importante que los padres no desahoguen los problemas de su relación con los hijos, además de que los pequeños no se pueden volver un sustituto de la pareja o del padre o madre de uno de los miembros.
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En el caso de que existan problemas de salud en uno de los padres, es importante no dejar que los hijos carguen con responsabilidades que no les corresponden, pues este es el camino para criar huérfanos emocionales.
Los expertos de BBMundo también señalan que cuando hay una separación de los padres, no deben posponer el rehacer sus vidas por temor a hacerles daño a sus hijos, ya que pueden generar sentimientos de culpa y de falta de acceso a la felicidad.
El amor será clave a la hora de criar hijos seguros y maduros, por lo que la convivencia, estar al pendiente de ellos en la escuela y sus actividades, además de brindarles confianza en todas sus etapas evitará que generen vacíos que los afectarán en el futuro.
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