Mientras que algunos estadounidenses obtienen agua desde su hogar, el resto paga por una botella del vital líquido, a un costo de 100,000 millones de dólares al año.
De acuerdo con Food and Water Watch, el costo promedio de un galón de agua embotellada de un solo servicio en USA es de casi US$9.5. Eso significa que, es tres veces más caro que el precio promedio de un envase de leche, y casi cuatro veces el precio promedio de un galón de gasolina regular.
Es decir, cuesta casi 2,000 veces más que el agua de grifo, la cual cuesta menos de un centavo por galón.
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Aunque muchas personas asumen que el precio es justificado por los beneficios para la salud del líquido en esta presentación, en la mayoría de los casos no es cierto.
"Es incorrecto suponer que el agua embotellada es de alguna manera más limpia, más saludable o más segura que el agua de grifo en Estados Unidos", señaló al sitio Business Insider, Peter Gleick, científico ambiental y cofundador del Pacific Institute.
Sin embargo, se dice que hay excepciones, pues el agua que proviene de los pozos privados de las personas, no está sometida a las mismas pruebas rigurosas que la que proviene de fuentes públicas.
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No obstante, hay muchos datos que hay que tener en cuenta antes de adquirir este producto.
1. Los estadounidenses consumen más agua envasada en general que las personas de cualquier otro país del mundo, a excepción de China. EUA se ubica en el sexto lugar en consumo de agua embotellada, según el Bottled Water Reporter.
2. En USA beben más este producto que la leche o cerveza. Cada persona consume aproximadamente 39 galones al año.
3. En 2016, se bebió más agua embotellada que gaseoas en Estados Unidos.
4. Cuesta 2,000 veces más beber agua embotellada que de grifo.
5. Algunas compañías refresqueras están invirtiendo en este producto.
6. "El agua embotellada no está mejor regulada, probada o monitoreada que el agua de grifo", revela Gleick.
7. El agua de grifo se prueba generalmente para determinar la calidad y contaminación con mayor frecuencia que el agua envasada.
8. Sin embargo, la calidad del agua de grifo puede variar considerablemente según el lugar donde vida. De acuerdo con la ley de la EPA, se debe recibir un informe anual de calidad del agua potable, que detalle de dónde proviene el agua y qué contiene.
9. Cabe mencionar que, si obtienes agua potable de un pozo privado, la EPA no está vigilando su calidad.
10. En un informe de 2011, se reveló que el 13% de los pozos privados analizados, contenían al menos un elemento como el arsénico o uranio.
11. Hacer agua embotellada es un proceso muy costoso que requiere de muchos recursos. Además, se necesita más de este líquido para fabricar una botella: las compañías norteamericanas usan 1.39 litros de agua para hacer un litro de la materia embotellada.
12. Por cada seis botellas que se usan, solo una llega a la papelera de reciclaje.
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