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Bri Crofton: 'Tengo barba debido al Síndrome de Ovario Poliquístico'

Bri Crofton escribió un blog en The Huffington Post donde describió su difícil infancia y cómo su padrastro y su mamá le hacían bullying.

Bri Crofton contó a través de un blog publicado en The Hufftington Post lo difícil que fue su adolescencia cuando comenzó a crecerle barba, siendo una niña. Tenía apenas 12 años en el momento que le empezó a salir vello facial.

Según su relato, esto sucedió dos años antes de que tuviera su primer período menstrual. Su madre la llevó al Boston Children´s Hispital, donde fue diagnosticada con PCOS o Síndrome de Ovario Poliquístico. Bri experimentó todos los síntomas del Síndrome, excepto la aparición de quistes en los ovarios.

Con el fin de ayudarla, su madre la llevó a que le practicaran diversos métodos para eliminar su barba. Además, la depilaban a pesar de lo doloroso que era por tener una sensible.

Ahora, la joven dice abiertamente que su mamá no tomaba en cuenta su opinión porque según ella, quería evitar que le hicieran bullying. “Mi opinión era irrelevante para ella”, escribió Bri. Al tiempo que a esa edad ni siquiera estaba totalmente consciente de lo malo que era tener pelos en la cara, hasta que su madre la alertó sobre el problema. Su mamá y su padrastro se burlaban de ella y eso la llevó a padecer ansiedad.

Bri recordó que en ocasiones lloraba y le pedía que pararan. “Quería salir corriendo y encontrar un círculo en donde pudiera ser una chica con barba y estar en paz, porque algo me decía que no había nada malo con mi cuerpo”.

“Eso me rompía el corazón”, sostuvo. En el escrito la autora afirma que esto le ha afectado a lo largo de su vida.

 La escritora se fue de su casa a los 15 años cuando sus padres se enteraron que era queer. Aunque admite que la comunicación entre ambas siempre fue muy mala. No obstante, esto fue la “gota que derramó el vaso”.

En ese momento, se vio obligada a vivir en la calle. Pero aún cuando no tenía un techo, encontraba un baño para afeitarse y hasta se arrancaba los pelos.

La joven sostiene que su madre nunca le explicó lo que era el PCOS. Solo recuerda que le prescribían pastillas anticonceptivas para regularle la menstruación.

Fue siendo adulta que le encontraron un quiste dermoide. Estos tipos de quistes son benignos. Y a los veinti y tantos años, un endocrinólogo le confirmó el diagnóstico, le habló de su desajuste hormonal, y de los síntomas que ella ya había experimentado durante la pubertad.

Después de tener un panorama más claro de la situación, continuaba rasurándose diariamente.

“Si alguien tocaba la puerta antes de que me duchara, me aterraba. Mi corazón saltaba hasta mi garganta y comenzaba el pánico. Corría de la gente cuando salía a buscar la correspondencia o si me encontraba a alguien en la tienda de la esquina. Andaba con una bufanda. Estaba completamente paranoica y ansiosa de que se me callera o alguien viera por los lados.  Pensaba que todos a mi alrededor se fijaban en mi vello facial”, escribió en el blog.

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Bri se automedicó por una década y mezclaba las píldoras con alcohol.

Sin embargo, a los 38 años decidió darle un giro a su vida y dejar de afeitarse. Pero no fue una transición automática porque los medicamentos y su mala alimentación hacían que su barba no creciera pareja. Por tanto, tuvo que cambiar sus hábitos alimenticios antes de volverlo a intentar.

Los síntomas de PCOS son:

Menstruación irregular

1. Infertilidad

2. Exceso de crecimiento de vello en el rostro

3. Obesidad

4. Dolor en la pelvis

5. Manchas o engrosamiento en la piel

Hoy, la joven estadounidense busca crear conciencia sobre el Síndrome de Ovario Poliquístico.

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