En 2009, Amanda Tysowski se enfrentó a muchos cambios en la vida. Después de comprar su primera casa, tuvo un accidente automovilístico. Durante la recuperación, ella no pudo trabajar. A medida que sus finanzas se tensaban y el estrés aumentaba, recurrió a la comida rápida para calmarse.
Mira también: Qué es la dieta pegana y cuáles son sus ventajas y desventajas
"Caí en una depresión", contó a Today la mujer de 31 años originaria de Winnipeg, Canadá. "Durante una cita con el médico había pesado 270 libras. El médico me dio una conferencia sobre 'obesidad mórbida', pero yo estaba en negación", confesó Amanda.
Foto: Instagram/diaryofashrinkingmommy / Today.com
Con una estatura de 5 pies y 9 pulgadas, Tysowski siempre pesaba más que sus amigos por 20 o 30 libras. Pero ella no se preocupaba por lo que comía y nunca hizo ejercicio. Disfrutaba de comidas indulgentes con varias bebidas alcohólicas y seguía aumentando de peso. Cuando se casó en 2011, pesaba 330 libras.
Mira también: 7 Alimentos que parecen saludables, pero no lo son y podrían hacerte engordar
Después de tener a su primer hijo en 2013, pesaba 385 libras. "Mi cuerpo era miserable. Tenía dolor todos los días", dijo Tysowski. "Cuando mi hija se volvió más activa, realmente pensé que este era el momento en que necesitaba hacer algo al respecto", contó la madre.
Foto: Instagram/diaryofashrinkingmommy / Today.com
Amanda fue a una clínica de pérdida de peso, donde el personal recomendó suplementos y un plan de comidas. Funcionó: en un año perdió 135 libras para pesar 250 libras. Pero ella quedó embarazada de nuevo. Esta vez tuvo tales malestares matutinos que solo se sentía mejor cuando comía.
Mira también: Sigue los ejercicios para embarazadas de Natasha Araos, esposa de Chyno Miranda (VIDEO)
"Me dije a mí misma que estaría bien, que podría lidiar con este primer trimestre y volver a lograrlo", dijo. "Gané 90 libras en esos nueve meses, aunque no lo vi", aceptó. Después de que su hijo nació en 2016, Tysowski pensó que simplemente podía volver a bajar de peso. Sin embargo, nada cambió.
Foto: Instagram/diaryofashrinkingmommy / Today.com
"Lo intenté durante seis meses y la escala de la báscula no se movió", contó. Tysowski comenzó a seguir a algunas mujeres que compartieron sus experiencias de pérdida de peso en Instagram. Usándolas como inspiración, comenzó a leer las etiquetas de los alimentos y a investigar sobre una alimentación saludable.
Mira también: 8 Cosas que le suceden a tu cuerpo cuando dejas de ejercitarte
Fue entonces cuando aprendió sobre la dieta cetogénica o keto, una dieta baja en carbohidratos, alta en grasas y proteínas. Decidió combinar eso con un ayuno intermitente en enero de 2017 para ver si podía estar más saludable. Inmediatamente, se dio cuenta de que no entendía lo que significaba comer de manera saludable.
Foto: Instagram/diaryofashrinkingmommy / Today.com
"No había aprendido nada sobre comida o cómo planear comidas para mí", dijo. Pronto descubrió que comer verduras y carne funcionaba y ella bajó de peso. Después de perder 100 libras, incorporó el ejercicio y comenzó a ir a un gimnasio para mujeres, donde hizo cardio y pesas. Hoy, ella hace caminatas todos los días y levanta pesas dos veces por semana.
Mira también: Esta pareja decidió adelgazar en su luna de miel y logró perder 407 libras | Today
"Pensé que hacer ejercicio era para perder peso, pero he descubierto que es como una terapia. Me siento mejor mentalmente”, afirmó. Hasta ahora, ella ha perdido 205 libras y ahora pesa 180 libras. Amanda no tiene un objetivo de peso en la mente, solo quiere estar sana y feliz. "La pérdida de peso ha sido mucho más mental que física. Soy más fuerte de lo que yo pensaba", dijo.
Tysowski comparte consejos para todos los que que esperan perder peso.
1. Enfréntate a ti mismo. En el pasado, cuando Tysowski se sentía estresada o infeliz, recurría a la comida para ayudar. Pero ella aprendió que tenía que abordar sus propios problemas para perder peso. "Tuve que aprender a lidiar con los sentimientos en lugar de reprimirlos y hacer frente a la comida", contó.
2. Tienes que querer de verdad. "Tus razones tienen que ser más grandes que lo que quieres", dice Amanda. “Pasamos toda la vida pensando en la comida (o no pensamos en ella) y para que nuestros cuerpos y nuestra salud cambien, necesitamos cambiar esos patrones de alimentación. Pero lleva tiempo”, afirmó.
3. Haz tu investigación. Si bien la dieta keto atrajo a Tysowski, se necesitó mucha investigación para aprender a comer. Al principio, solo cambiaba las comidas que le gustaban por versiones bajas en carbohidratos y sin azúcar. Pero luego aprendió a ser más creativa con su alimentación y perdió su gusto por los alimentos muy dulces.
Foto: Instagram/diaryofashrinkingmommy / Today.com
Amanda todavía está siguiendo la dieta keto hoy. “Otro gran desafío fue aprender qué alimentos estaban bien para comer. Te pasas toda la vida comiendo la misma comida, así que mentalmente, tener que pensar en otros alimentos todos los días fue un desafío, hasta que se convirtió en la nueva normalidad", afirmó.
Puedes leer el artículo original aquí.
En video: Chiquis Rivera entró a una dieta que alarmó a sus fans y esta es la razón