La motivación laboral es muy variada. Hay quienes se sienten incentivados por los logros, hay otros que lo hacen por la idea de alcanzar el poder y también aquellos, que se sienten estimulados por los vínculos que establecen, la seguridad que sienten o hasta por la búsqueda del riesgo.
Pero, aunque en sí misma ninguna es mejor que la otra, si tienes esta motivación, podrías estar de suerte. ¿Por qué?
Motivación, que lleva lejos
Quienes son motivados por los logros, es decir, los trabajadores que buscan sobresalir y alcanzar un nivel personal cada vez más alto, tendrían 44% más de posibilidades de amar su empleo y mantenerse en él, informa el sitio CNBC, a partir de un relevamiento de Leadership IQ. ¿Por qué?
Las personas que están motivadas por los logros son diferentes al resto: dependen menos de su ambiente laboral, para que su trabajo les ofrezca un sentido profundo. Es decir, pueden amar su empleo, incluso si no tienen los mejores jefes o compañeros de trabajo.
Lo importante para ellos, es poder medir sus propios logros, calificar su progreso y establecer nuevos objetivos para sí mismos.
Para llegar a estas conclusiones, la compañía de investigaciones y entrenamiento laboral Leadership IQ, realizó un relevamiento a 20,000 personas, respecto de qué las motiva en el trabajo.
3 pasos para ganar impulso de logro
¿Ser motivado por los logros te resulta una propuesta atractiva? Para hallar tu impulso interior, Mark Murphy, fundador de Leadership IQ, recomienda en CNBC:
1. Encuentra un objetivo que puedas controlar
Plantearse, por ejemplo, “Quiero ganar 10% más”, requiere que tu empleador, tengo presupuesto para aumentos salariales. Un mejor objetivo sería: “Deseo hacer 10 ventas al día” o “Quiero completar una maestría”. Luego, escríbelo. Tendrás más chances de concretarlo.
2. Busca proyectos que nunca hayas hecho
Quienes están motivados por los logros disfrutan de proyectos fuera de su zona de confort. Busca un desafío y piensa en las habilidades que ganarás con él, independientemente de si resulta o no, exitoso.
3. Comienza el día con un plan
Cada mañana, pregúntate: “¿Qué debo lograr hoy para ser exitoso?” Esto te dará un objetivo a corto plazo con el que medir tu jornada, concluye Murphy, en el portal mencionado.
Con un mal jefe, podrías desear renunciar a tu trabajo. Excepto, ¡que sepas cómo sobrevivir a él! Mira.
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