La piel del rostro está expuesta todo el tiempo a factores de estrés, contaminación y rayos UV que van originando diversos problemas como arrugas, manchas y acné. Y para solucionar estas molestias muchas veces es necesario recurrir a costosos tratamientos o cremas que no siempre son accesibles para todas.
Por suerte, también hay algunas alternativas naturales que te ayudan a mantener tu cutis impecable sin tener que gastar una fortuna, y una de ellas son los masajes faciales con cubos de hielo que se han vuelto muy populares.
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Lo mejor de este tratamiento es que puedes realizarlo incluso cuando estás de viaje, y no tiene solo uno sino muchos beneficios, entre los cuales se destacan los siguientes.
1. Detiene el paso del tiempo
El hielo es muy utilizado en los spas para prevenir la aparición de arrugas, e incluso existe un tratamiento llamado crioterapia en el que te prometen tener una piel siempre joven aplicando frío. Así que si deseas desvanecer un poco las líneas de expresión, o tensar tu piel en una zona específica, bastará con frotar un cubo de hielo sobre el área todas las noches.
2. Desinflama
Si tus ojos están hinchados todo el tiempo y tienes bolsas y ojeras debajo de ellos, puedes cubrir algunos cubitos con un trozo de tela de algodón y usarlo como antifaz durante 5-10 minutos antes de dormir. O simplemente aplicarlo por las mañanas para reducir la inflamación.
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3. Prevenir los puntos negros y disminuir la apariencia de los poros
El frío ayuda a cerrar los poros y permite que los rastros de grasa o suciedad se eliminen más fácilmente. Por lo que de integrarlo a tu rutina de belleza podrás ver cómo mejora la apariencia de tu piel, y los granitos, puntos negros e incluso el acné, disminuyen.
4. Estimula la circulación
Dar un masaje con hielo desde el centro hasta las orillas de la cara hace que tu circulación sanguínea mejore y retrasa la aparición de arrugas. Además, ayuda a tener la piel más suave y con un brillo único.
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5. Hidrata y reduce el enrojecimiento
La piel mixta es un poco complicada de tratar, pues a veces los productos hacen que las zonas se resequen de más o no logran controlar el exceso de grasa que hay en ciertos lugares. Y en estos casos el hielo es una excelente solución, pues como lo mencionamos previamente limpia los poros y previene el brillo, reduce el enrojecimiento al darte una mejor circulación y proporciona una hidratación uniforme en las áreas que se necesita.
Es importante recalcar que para recibir todos los beneficios, debes aplicar el hielo siempre sobre la piel limpia y usar una tela de algodón para cubrirlo y dar masajes circulares sin ejercer demasiada presión.
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