En el último tiempo, los científicos han estado estudiando la relación entre el sentido del olfato y la memoria. Por ejemplo, perder el olfato podría ser un indicador temprano de enfermedad de Alzheimer, dice un estudio publicado en la revista científica Journal of the American Geriatrics Society, en 2017. Ahora, una nueva investigación se centra en el vínculo entre la respiración y la memoria. ¡Checa lo que dice!
Mejor por la nariz
Respirar por la nariz, en lugar de hacerlo por la boca, podría mejorar la memoria olfativa, dice el estudio publicado en la revista científica The Journal of Neuroscience, en octubre de 2018.
"Nuestro estudio muestra que recordamos mejor los olores si respiramos por la nariz cuando se está consolidando el recuerdo (es decir, durante el proceso que tiene lugar entre el aprendizaje y la recuperación del recuerdo)", explica Artin Arshamian, uno de los investigadores, en el sitio de Karolinska Institutet (Suecia), del que forma parte.
Respiración y comportamiento
"La idea de que la respiración afecta nuestro comportamiento no es nueva. De hecho, el conocimiento existe hace miles de años, en áreas como la meditación", señala el investigador. Pero lo que todavía no se ha logrado desde la ciencia es explicar qué sucede en el cerebro durante la respiración y cómo eso se conecta con la memoria y los recuerdos.
Nuevas herramientas
El equipo del que forma parte Arshamian tiene como objetivo develar ese misterio. Es decir, descubrir el mecanismo responsable del efecto que la respiración tiene en la memoria olfativa. Y, para eso, las herramientas actuales serían de gran ayuda.
"Previamente había una imposibilidad práctica, dado que era necesario insertar electrodos directamente en el cerebro. Hemos logrado superar ese problema y estamos desarrollando un nuevo modo de medir la actividad en el cerebro y en el bulbo olfatorio sin tener que insertar electrodos", añade Arshamian.
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