IE 11 is not supported. For an optimal experience visit our site on another browser.

5 errores comunes que cometen las mujeres cuando se lavan el rostro

Parecería ser un proceso más que sencillo, pero, aunque no lo creas, hasta para limpiarse la cara hay que seguir ciertas reglas. Toma nota.

En teoría, lavarse la cara es una cuestión sencilla que no requiere de mucha "ciencia", pero, aunque no lo creas, es común que las mujeres cometan varios errores durante su rutina diaria de limpieza. Por eso, para impedir que le hagas daño a tu piel y que consigas un rostro realmente fresco y radiante, te diremos cuáles son esos detalles que debes evitar. ¡Toma nota!


Mira también: Este peinado clásico puede causar un gran daño a tu salud y no lo sabías

1. No lavarte las manos primero
Si tienes las manos sucias y comienzas a agarrar tus productos de limpieza... ya los contaminaste. Además, como indica el sitio mejorconsalud.com, si crees que el producto que usas para lavar tu rostro eliminará las bacterias de tus manos, te equivocas, ya que no están diseñados para combatir ese tipo de impurezas que, al final, solo se esparcirán por tu cara.

2. Utilizar agua muy caliente o muy fría
El agua caliente puede alterar la humedad de tu piel y provocar resequedad, mientras que el agua fría acelera la producción de sebo en el cutis. Así que, mejor lava tu rostro con agua templada para evitar cualquier tipo de daño capilar, tal y como aconseja El Espectador

Mira también: Reventar tus puntos negros es muy peligroso para tu salud, según especialistas

3. No elegir el producto adecuado
De entrada, nunca deberías lavarte el rostro con un jabón para el cuerpo o las manos, porque ninguno de ellos está diseñado para cuidar la delicada piel de la cara. Busca un limpiador facial que no altere el pH del cutis y que además favorezca a tu tipo de piel (ya sea grasa, seca, mixta, sensible o propensa al acné), recomienda el sitio salud180.com. Cuando apliques el producto, procura hacerlo con un masaje suave, para estimular la circulación.

4. No cuidar la exfoliación
Este proceso no debe hacerse muy seguido, ya que podría resecar la piel. Conviene hacerlo una vez a la semana para eliminar células muertas, pero además de prestar atención a los ingredientes del producto que elijas (para que no resulten muy agresivos para tu tipo de cutis), es importante que exfolies con delicadeza, usando tus dedos en lugar de un paño para evitar rasgar la piel, sugiere Salud 180.

Mira también: ¿Haces mucho ejercicio y no pierdes ni una libra? Esta puede ser la razón

5. No enjuagar bien
Cuando no eliminas por completo el limpiador facial, los residuos se acumulan en la superficie de la piel, obstruyen los poros y dan pie a la aparición de barritos. Además, un mal enjuague puede provocar que tu rostro se sienta seco, tenso o irritado, así que asegúrate de tomarte el tiempo necesario para hacerlo correctamente, incluyendo la quijada, la línea del cabello y la nariz —tres zonas que según Mejor con salud, solemos pasar por alto.

Ahora bien, recuerda que secarte con suavidad también es importante. Nunca frotes la toalla sobre tu cara, mejor utiliza palmaditas y así evitarás que la piel se enrojezca e irrite.

EN VIDEO: La ciencia afirma que sí existe el “olor a viejito” y es imposible de evitar