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¿Sabes cómo asar las mejores hamburguesas?: ¡Aquí te lo decimos!

Tips variados para preparar unas maravillosas hamburguesas asadas en casa

Cuando compres carne molida, verás que la mayoría de los paquetes enlistan una proporción de carne magra contra grasa. “Para mí, cualquier hamburguesa que esté hecha con carne molida con menos [grasa] que 80/20 es una pérdida de tiempo”, según Rick Browne, experto en asados. “No comemos hamburguesas todos los días, pero cuando lo hacemos, las queremos jugosas y húmedas.” Él agrega que veinte por ciento de grasa es el estándar para restaurantes y concursos de hamburguesas. “Lo necesitas porque la grasa te da sabor, te da humedad y mantiene la ligereza de la hamburguesa a la mitad, para que no esté toda compacta.” (La grasa se derrite y deja huecos de aire, lo cual hace menos densa a la hamburguesa, explica él.)

Hamburguesas perfectas

Sazona la carne molida con sal (Browne recomienda una cucharadita por libra de carne), pimienta y cualquier otro condimento seco que te agrade, forma bolas con la carne y luego aplana las bolas con suavidad. “No presiones [las bolas] con las manos ni las aprietes”, advierte. Algunos expertos recomiendan hacer un agujero en medio de cada hamburguesa, para que el centro no se abulte cuando las ases. Browne está de acuerdo en que no es mala idea… aunque esa táctica no hará ni deshará tu hamburguesa.

Vamos a asar

Sazona las hamburguesas con sal adicional, si lo deseas, y luego colócalas en una parrilla caliente y bien aceitada, sobre fuego directo durante más o menos tres minutos, voltéalas y continúa asándolas sobre fuego directo durante alrededor de tres minutos más; cambia las hamburguesas a fuego indirecto y ásalas durante otro par de minutos más por cada lado. (“Estas instrucciones son para hamburguesas término medio rojo; creo que esa es la única manera de comer hamburguesas”, dice Browne.)

La USDA recomienda asar la carne molida, el puerco, la ternera y el cordero a una temperatura interna de 165 grados. Browne indica clavar un termómetro a cada hamburguesa de lado, para que registre la temperatura en el centro de la hamburguesa. Si prefieres las hamburguesas bien cocidas, dice Browne, “mejor sería que comieras un disco de hockey”, pero concede que puedes preservar un poco de los jugos si preparas hamburguesas más delgadas, lo cual permitirá que la carne se cueza más rápido.

Consejo para tostar

Cuando las hamburguesas estén listas, retíralas de la parrilla, cúbrelas con plástico y déjalas reposar durante uno o dos minutos más. Su consejo final sobre hamburguesas: “Nunca sirvas una hamburguesa sobre un pan regular que no haya sido tostado.” ¿Por qué? “Justo cuando muerdas la hamburguesa, los jugos comenzarán a fluir y el pan se desbaratará”, explica él. “Un par de concursos te descalificarían si no tuestas el pan.” ¿Quién lo hubiera sabido?

¿Cómo prefieres tu hamburguesa? ¿Concuerdas con el experto?