Kanye West se sentó a platicar con Nick Cannon para el último episodio del podcast "Cannon's Class". Durante la conversación de 44 minutos, ambos discutieron de todo, desde la pelea con Taylor Swift en los MTV Video Music Awards de 2009, hasta su hospitalización en 2016 y el controversial momento de su primer mitin presidencial, en donde lloró al hablar del aborto.
West desató la polémica en su primera campaña presidencial, al compartir un momento significativo de su vida, cuando él y Kim Kardashian, inicialmente contemplaron el aborto antes de decidir tener a su primera hija, North West. Las declaraciones del rapero casi le cuestan el divorcio con su esposa.
Después de discutir su patrimonio neto y sus objetivos a largo plazo de ser reconocido como multimillonario por Bloomberg y Forbes, Kanye dijo, "El logro era tener eso, y seguir siendo lo suficientemente sensible como para llorar ante la idea de abortar a mi hija".
"Como, tuve un amigo que dijo, 'No lo estás disfrutando'. Bueno, ¿qué es eso? Porque North no lee Forbes", dijo. "Ella solo sabe si papá está en casa o no. Si estoy fuera de dos semanas, ella dirá 'papá, te extraño'", añadió.
El rapero se sinceró sobre la relevancia que tiene la familia que formó con Kardashian y con sus seres queridos y descartó la separación como una forma de resolver los problemas.
"Es como si la familia fuera la clave del mundo, punto, desde nuestra familia inmediata hasta nuestros amigos y familiares, nuestros compañeros de trabajo y familia, nuestra ciudad y familia, nuestro estado y familia, nuestro país y nuestra familia, nuestro mundo", compartió.
"La cultura de la humanidad debe ser familiar. Una cultura de familia. Pero el diseño de nuestras ciudades, el diseño de nuestras escuelas, hay muchas cosas diseñadas para no promover a la familia; están diseñados para crear separación", dijo.
El rapero también habló sobre su campaña a la presidencia, incluidos los orígenes de su propia pancarta política "Birthday Party" y explicó cómo está ligado a su criterio sobre el aborto.
"Cuando se me ocurrió el nombre 'Birthday Party', fue divertido. Fue una locura. Yo estaba como, '¡eso es!'", señaló. "Solo puedo darle la gloria a Dios porque el punto de conexión con una fiesta de cumpleaños es lidiar con la vida y pro-vida. Porque estos son niños que ahora tendrán la oportunidad de tener cumpleaños", añadió.
En 2016 el intérprete de 43 años fue hospitalizado. El diagnóstico, sufrió una "psicosis temporal" causada por privación del sueño y deshidratación.
"Dios me puso de rodillas varias veces. La primera vez que me llevaron al hospital en 2016, de hecho, comencé a leer la Biblia. Eso fue parte de lo que Dios me hizo para reaccionar. Ya sabes, Dios tiene un llamado a todos nosotros y nos usa de diferentes maneras", contó.
La relación del cantante con Dios, lo ha hecho enfrentar varias polémicas en torno a sus acciones, hechos que más tarde adjudica a la divinidad para justificarlos.
El rapero volvió a hablar del incidente que tuvo con Swift en 2009, que fue el inicio de una guerra entre ambos. El famoso le confesó a Nick que atacó a la cantante en el escenario porque Dios así lo quiso.
"En estos momentos, Dios me está dando la información, si Dios no hubiera querido que yo subiera al escenario y dijera que Beyoncé tenía el mejor vídeo, no me habría sentado en la primera fila. Me habría sentado al final", dijo.
NO TE PIREDAS:
Kim Kardashian da a luz a Kylie Jenner en un video inédito de Kanye West
Kim Kardashian y Kanye West sanaron su relación con las vacaciones
EN VIDEO: Kim Kardashian y Kanye West con sus hijos en Nueva York