El bautismo de la hija del príncipe Harry y Meghan Markle, Lilibet Diana, se ha convertido en uno de los eventos más esperados por los súbditos de la monarquía inglesa, ya que aún se desconocen los planes que la pareja llevará a cabo.
A pesar de las especulaciones que se han hecho en torno a este suceso, ya existe una declaración oficial hecha por un portavoz de Harry y Meghan Markle, que habló sobre las verdaderas intenciones que tiene la pareja.
“Los planes para el bautizo de la bebé no han finalizado. Y como tal, cualquier suposición sobre lo que sucederá o no, será mera especulación”, indicó el portavoz a ‘E! News’.
El pasado mes de agosto se publicó en el sitio ‘The Mirror’ que la pareja quería que el servicio se llevara a cabo en Windsor y que la reina Elizabeth estuviera presente. Sin embargo, por la situación actual en el mundo, se dijo que el bautismo de la niña podría celebrarse en Estados Unidos.
“Los duques de Sussex fueron enfáticos en que tenían la intención de hacer las cosas a su manera”, dijo una fuente al sitio británico.
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Según las publicaciones, lo más seguro es que el bautizo se lleve de manera privada y a puerta cerrada, ya que los duques han tratado de guardar su privacidad lo más posible y ni siquiera han mostrado aún el rostro de su bebé.
Su primogénito, Archie, fue bautizado en la capilla del castillo de Windsor cuando tenía dos meses, por lo que las especulaciones son cada vez mayores dado que Lilibet ya tiene cuatro meses.
Se publicó que los duques planeaban viajar a Inglaterra para acercarse nuevamente a la familia real: “Harry le dijo a la gente que quieren que Lili sea bautizada en Windsor, al igual que su hermano. Están felices de esperar hasta que las circunstancias lo permitan”.
Sin embargo, el tiempo transcurre y lo más probable es que sus planes tengan que cambiar, para hacerlo más cerca de su residencia actual, por lo que se ha dicho que sería en California.
“Es probable que la bauticen en California, aunque había rumores de un posible bautizo en Windsor. Las relaciones de Harry y Meghan con la prensa británica fueron cuesta abajo cuando Archie fue bautizado en privado y no se dieron a conocer los nombres de los padrinos”, dijo Richard Fitzwilliams al sitio ‘Express’.
Aunque Harry desea que su abuela esté presente en este momento familiar, es poco probable que acuda, debido a que la monarca no siempre atiende los eventos relacionados con miembros reales que no estén en los primeros sitios de la línea de sucesión. La reina Elizabeth no acudió al bautizo de Archie ni al de Louis, el tercer hijo de William y Kate Middleton.
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