Ben Watkins, de 13 años, quien participó en la sexta temporada de "MasterChef Junior", que fue transmitida por la cadena Fox, fue diagnosticado con un tumor raro solo tres años después de la trágica muerte de sus padres.
Watkins, quien fue uno de los participantes más populares del reality show, es una de las seis personas en el mundo a las que se les detectó el histiocitoma fibroso angiomatoide.
Esta información se dio a conocer luego de que su abuela, Donna Edwards, y su tío hicieron una publicación en la plataforma de mecenazgo GoFundMe para juntar los fondos necesarios para brindarle un buen tratamiento a Ben.
Foto: GoFundMe
Un estudio publicado por el Hospital Universitario y Politécnico La Fe, de España, señala que el histiocitoma fibroso angiomatoide es un tumor de tejidos blandos poco frecuente y con un potencial bajo de malignidad, además indica que suele aparecer en las extremidades de los niños y adolescentes.
Según la información publicada en GoFundMe, Ben sería una de las seis personas en el mundo que son atendidos por presentar ese tipo de tumores. La meta de recaudación es de US$130,000 y hasta ahora, han recaudado más de US$48,000.
Ben se encuentra actualmente recibiendo tratamiento en el hospital Lurie Children's de Chicago.
En la publicación de GoFundMe se menciona, "A pesar de todas las pruebas y tribulaciones de Ben, sigue siendo positivo y espera volver a la cocina y perseguir su sueño de convertirse en ingeniero. Los miembros de la comunidad se han unido al ver cómo la vida desafía a Ben, pero no lo descarrilará de alcanzar su máximo potencial y cumplir sus sueños".
En 2017 Ben Watkins tuvo que lidiar con una gran tragedia. Su padre, Michael Watkins, que en ese tiempo tenía 46 años, le disparó y mató a esposa Leila Edwards, de 43; luego, él se suicidó.
En un reportaje publicado por el Chicago Tribune en 2017, Ben dijo que su mamá había sido muy importante para él, "Mi madre me enseñó todo lo que sé"
Leila operaba el Vitral Wonderland ya que era una talentosa artista de vidrieras y fabricante de joyas. Su negocio estaba ubicado a un lado del restaurante de pizza Flamingo, que era dirigido por su esposo.
Fue justo en ese sitio donde el pequeño Ben tuvo su primer contacto con la cocina, ya que solía acompañar a su padre y ayudarlo con algunas tareas.
Cuando ocurrió lo que las autoridades llamaron asesinato-suicidio de sus padres, la comunidad cercana al joven huérfano creó la campaña #Love4Ben, con la que lograron recaudar US$30,000 para que pudiera continuar con su vida, ahora en compañía de su abuela Donna Edwards.
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