Fue en marzo del año pasado, cuando Taylor Swift confesó en una entrevista para la revista Elle que su madre nuevamente se enfrentaba la enfermedad del cáncer que se le había diagnosticado desde el 2015.
Durante todo este tiempo, Andrea Finlay, madre de Taylor luchó por recuperarse de su enfermedad. Sin embargo, recientemente la intérprete de "Lover", reveló durante una emotiva entrevista con Variety que, desafortunadamente, mientras su madre recibía quimioterapia para el cáncer de seno, los médicos hicieron un nuevo diagnostico devastador.
"Mientras estaba en tratamiento, encontraron un tumor cerebral", dijo Taylor a la revista."Y los síntomas de lo que atraviesa una persona cuando tiene un tumor cerebral no se parecen en nada a lo que hemos pasado antes con su cáncer. Así que ha sido un momento realmente difícil para nosotros como familia", detalló la estrella de 30 años sobre la lamentable noticia.
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La salud de su mamá es una de las principales razones por las que Swift decidió reducir su próxima gira Lover, eligiendo hacer solo cuatro paradas en los EE. UU, antes de participar en la temporada de festivales de Europa a finales del verano de 2020.
"Quiero decir, no sabemos qué va a pasar", explicó la ganadora del Grammy. "No sabemos qué tratamiento vamos a elegir. Simplemente fue una decisión que tomamos en ese momento, por ahora, por lo que está sucediendo".
Taylor mencionó en ocasiones lo difícil que ha sido para ella enfrentar esta situación, pues su madre, de 62 años, es su adoración y su apoyo principal.
"Todos aman a su madre, todos tienen una madre importante", indicó Taylor a Variety. "Pero para mí, ella es realmente la fuerza que me guía. Casi todas las decisiones que tomo, le hablo primero. Así que obviamente fue un gran problema hablar sobre su enfermedad", agregó la cantante.
En 2015, Swift tomó su cuenta de Tumblr para compartir las desgarradoras noticias sobre la salud de su mamá, quien comenzaba la dura batalla contra el cáncer. "Para la Navidad de este año, le pedí a mi madre que uno de sus regalos para mí fuera ir al médico para hacerse un examen de detección de problemas de salud, solo para aliviar algunas de mis preocupaciones", escribió la artista.
"Ella estuvo de acuerdo y entró para que la revisaran. No hubo banderas rojas y se sintió perfectamente bien, pero lo hizo solo para sacar a mi hermano y a mí de su caso al respecto. Los resultados llegaron y me entristece decirte que mi madre ha sido diagnosticada con cáncer", compartió en aquella ocasión.
"Me gustaría mantener en privado los detalles de su condición y planes de tratamiento, pero quería que lo supieran", continuó Taylor, quien aseguró que tenía la intención de mantenerlo en privado, pero su madre quiso que diera las noticias.
"Ella quería que lo supieran para recordarles que ir a un examen de cáncer podría conducir a un diagnóstico temprano y una batalla más fácil", aseguró la intérprete.
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Y aunque en ese año Andrea completó con éxito el tratamiento, Taylor reveló en marzo de 2019 que, desafortunadamente, su madre había recaído en la enfermedad.
"Mi madre ahora está peleando su batalla nuevamente", escribió en un ensayo para la revista Elle, titulado "30 Things I Learned Before Turning 30".
"Me enseñaron que hay problemas reales y luego está todo lo demás. El cáncer de mi madre es un problema real. Solía estar muy ansiosa por los constantes altibajos. Ahora mi preocupación, estrés y oraciones están enfocados solo a problemas reales", sostuvo la artista.
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