El esquiador Bode Miller y su esposa Morgan Beck, acaban de dar la bienvenida al mundo a sus hijos gemelos. Durante el programa "Today", Bode dio la noticia vía telefónica, "Finalmente llegaron. Nos tenían esperando y esperando y esperando. Estaban volviendo loca a Morgan".
El profesional de esquí alpino y la jugadora de voleibol de playa profesional, dieron a conocer en agosto, por medio de redes sociales, que se encontraban esperando a sus nuevos hijos, "¡Gemelos! ¡Gemelos idénticos! No podría estar más emocionado de hacer crecer esta hermosa familia que mi esposa y yo hemos creado. Sueño hecho realidad".
El anuncio ocurrió un año después de que la pareja sufrió la dolorosa muerte de su hija Emeline, de 19 meses, debido a un terrible accidente. La pequeña cayó en la piscina de un vecino mientras sus padres conversaban.
Pese a que intentaron reanimarla vía RCP, con la asistencia de un operador del 911, la pequeña no sobrevivió.
Cuatro meses después de la tragedia, recibieron a su hijo llamado Easton. Más tarde Morgan Beck declaró a E! News que estar embarazada y perder a un hijo no fue fácil, y lo definió como, "la experiencia más confusa de la vida".
Ahora que recibieron a sus gemelos, la experiencia fue toda una odisea para la familia. El atleta olímpico dijo que fue una de las cosas más locas de su vida, ya que las parteras no llegaron a tiempo a su casa y él y su mamá fueron los encargados de recibir a los bebés.
Bode explicó que cuando las mujeres que los ayudarían llegaron a su casa, ellos ya tenían a los gemelos en los brazos, "Cuando llegaron allí, mi madre y yo estábamos abrazando a los bebés. Afortunadamente, mi madre era partera, pero no lo había hecho en más de 20 años y nunca recibió a gemelos".
"Ambos estamos bastante relajados y tranquilos. Pero ciertamente no estábamos calificados para hacer una entrega a domicilio de gemelos y sin ayuda", bromeó Bode Miller.
También dijo que al final, la experiencia fue muy mágica, "Todavía estamos alucinando con toda la experiencia", y añadió, "Fue increíble tener el parto de manera tan espontánea, pero tan bien como se logró. Y que Bode pudiera tener a sus gemelos idénticos con mi madre, fue pura magia".
Miller explicó que aún no tienen pensados los nombres para los nuevos integrantes de su familia, pero que ya los buscarán con calma en su hogar, "Esa es una de las ventajas de hacerlo en casa. En el hospital, no te dejarán salir de allí a menos que los nombres. Se nos ocurrirá algo. Tienen personalidades tan diferentes en este momento y va a ser genial dejarlos un poco".
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