Katy Perry se une al club de los famosos que enfrentan demandas por publicar fotos de ellos mismos en las redes sociales, las cuales son tomadas por paparazzi. En 2016, la cantante se disfrazó de Hillary Clinton para la fiesta de Halloween de la actriz Kate Hudson, y a través de su cuenta de Instagram compartió algunas fotos de su disfraz, incluida una foto de agencia.
Tres años después, la agencia fotográfica, que posee los derechos de la imagen, demandó a la cantante por más de 150,000 dólares. El grupo Backgrid presentó su demanda el pasado martes 29 de octubre, en la que se indica que Perry violó la ley federal al publicar la foto, por los derechos de autor.
La agencia afirmó que se habían dirigido a los representantes de la intérprete varias veces para hablar sobre la infracción. Sin embargo, desde el 2017 hasta ahora no obtuvieron respuesta alguna por parte de la prometida de Orlando Bloom para pagar a la empresa por obtener la licencia de la imagen.
Perry publicó la foto, que también muestra a un amigo vestido como Bill Clinton y a Orlando Bloom vestido como una caricatura del presidente Donald Trump.
Katy Perry se disfrazó como muestra de apoyo a la ex candidata presidencial Hillary Clinton, que en ese entonces se encontraba en campaña. La estrella de pop compartió en su perfil social la transformación a la que se sometió para realizar su épico disfraz de Halloween.
Perry publicó una foto en Instagram en la que aparece sosteniendo una copa de martini mientras su equipo de producción la deja lista. La cantante usó una peluca rubia, una prótesis facial y un clásico traje rojo.
En el último par de años, una oleada de quejas de fotógrafos comenzó a producirse, pues varias celebridades han sido demandadas por publicar en sus redes sociales imágenes tomadas por paparazzi, quienes disputan los derechos de autor de las fotografías.
Los artistas demandados podrían pensar que ser el sujeto de una imagen significaría que pueden usarla libremente, y esto es algo que ellos contrademandan.
Pero en base a la ley de derechos de autor, es el fotógrafo quien generalmente posee los derechos de una imagen, a menos que se haya concedido una licencia a un tercero, como su agencia. La propiedad de la fotografía corresponde en la mayoría de las veces a la persona que originalmente tomo la foto con una cámara.
Khloé Kardashian fue una de las primeras personas en enfrentar una demanda de este tipo, cuando en el 2017 publicó en Instagram una foto en la que aparecía visitando un restaurante en Miami. La agencia de fotos que fue la encargada de obtener la imagen, solicitó daños por más de 175,000 dólares.
La empresa argumentó que la imagen, la cual fue cedida exclusivamente al diario británico The Daily Mail, fue utilizada por Khloé sin permiso, además de no mencionar el crédito.
Khloé dijo a sus seguidores en Twitter lo difícil que era obtener los permisos adecuados para poder compartir sus fotografías
"Tengo que tener derechos sobre mis propias imágenes, lo cual me sorprende", confesó la famosa a uno de sus fans. "Legalmente, pueden acosarme y hostigarme y luego, encima de todo, ni siquiera puedo usar las fotos que me toman", dijo Kardashian.
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