Fue en 2013 cuando Roger, un canguro de 89 kilos y 182 centímetros de altura se hizo popular alrededor del mundo al protagonizar un documental, y en 2015 se hicieron virales unas fotos donde mostraba su increíble fuerza doblando con gran facilidad un cubo de metal.
Tanta fue su fama, que incluso sus fotos y videos publicados en la cuenta de Instagram @thekangaroosanctuary acumulan millones de likes.
Sin embargo, Roger murió a los 12 años por causas naturales en el santuario de Alice Springs, en Australia, según informaron sus cuidadores.
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Chris Barns, quien lo rescató cuando era una cría y se encargaba de su cuidado, dijo que el canguro murió a la sombra de su arbusto favorito, donde le gustaba resguardarse del intenso calor de la región.
"Vivió una buena y larga vida y fue amado por millones en todo el mundo", señaló Barns a medios locales.
El canguro, quien no podía ser puesto en libertad por problemas en una pata, recibió múltiples homenajes a través de redes sociales, principlamente por parte de usuarios australianos tras su fallecimiento.
"Descansa en paz Roger, has dejado un legado y enseñado al mundo la alegría de los canguros", apuntó una usuaria de Twitter, mientras que otro le agradeció que hubiera "despertado a muchas personas en todo el mundo sobre lo bonitos y especiales que son los canguros".
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