Meghan Markle derramó algunas lágrimas al recibir una serenata sorpresa durante su reciente estancia con el príncipe Harry en Tonga.
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Pero la duquesa de Sussex no lloró de tristeza, sino de alegría al escuchar una canción típica del país oceánico dirigida a espantar a los mosquitos con gestos y zumbidos.
Foto: Getty Images
El tema, entonado por el coro masculino del Tupou College, provocó un estallido de risa en Markle, quien tuvo que secarse las lágrimas tras el espectáculo.
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El particular número se realizó en una zona en la que existen antecedentes de picaduras de mosquitos que contagian el virus del zika, el cual puede afectar a mujeres embarazadas como la duquesa.
Sin embargo, tras consultar con algunos especialistas, Meghan y Harry decidieron visitar el lugar con precauciones como usar prendas no tan livianas y aplicaciones cuantiosas de repelente de insectos.
Durante el evento, Markle usó un vestido abotonado hecho con un material grueso, pero con mangas enrolladas hasta los codos que dejaron al descubierto sus brazos.
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Los duques de Sussex continuaron su gira por Tonga al reunirse con artesanos y comerciantes locales, mientras cantantes y bailarines amenizaban el encuentro tocando música originaria de la isla.
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La princesa Angelika y al príncipe Ata, hijo del rey Tupou VI de Tonga, agradecieron la visita a Meghan y Harry, a quienes reconocieron por su papel fundamental para "arrojar luz sobre el empoderamiento de los jóvenes".
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