Desde Spider-Man 2 del 2004, desarrollado por Activision para la generación de los 128 bits, el arácnido no había protagonizado buenos títulos. Ahora en manos de Insomniac Games, padres de Sunset Overdrive y Ratchet and Clank, el Hombre Araña está de regreso con una gran aventura.
Bryan Intihar y Ryan Smith, directores de este título exclusivo para PlayStation 4 en conjunto con los guionistas Jon Paquette; Dan Slott, quien se hace cargo de escribir las historias de The Amazing Spider-Man desde el 2010 y Christos Gage, quien ha participado en Avengers Academy o The Superior Spider-Man; firman una obra casi perfecta, pero que tropieza con los típicos vicios de los juegos de mundo abierto.
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El argumento cuenta con todos los elementos para mantenernos pegados al DualShock, sobre todo porque respeta lo más característico de la doble vida de Peter Parker: es un completo desastre.
Su empleo es inestable, su relación con Mary Jane Watson pasa por un bache, debe meses de alquiler, y encima debe controlar el crimen de la Gran Manzana.
Foto:Insomniac Games
El Peter que nos toca controlar no está basado en algún cómic o película y eso es gracias a la libertad creativa que Marvel y Sony dieron al estudio.
La trama está llena de giros argumentales, algunos predecibles y otros que sí son inesperados; solo nos hubiera gustado que profundizaran un poco más en algunos personajes, como Mister Negative. Pero en general, de principio a fin, el argumento es lineal y cumplidor.
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La destreza de la araña
Manejar al arácnido por New York es adictivo, y básicamente se hace con un solo botón (R2). Balancearse entre los rascacielos con la telaraña es satisfactorio gracias a un sistema de físicas que trata de ser lo más realista posible.
Recorrer la ciudad resulta entretenido, el estudio ya había logrado algo similar en Sunset Overdrive, así que aplicaron ese conocimiento en Spiderman-Man, de tal forma que ir de punta a punta de la isla no resulta aburrido e incluso es preferible colgarse entre los edificios que optar por el viaje rápido.
¿Batman, eres tú?
Otro acierto del estudio fue tomar como inspiración el combate de la trilogía Arkham de Rocksteady, el cual fue adaptado a las características de Hombre Araña, ya que es más ligero y veloz que Batman.;
El resultado son combates que en momentos lucen espectaculares y retadores, gracias a la variedad de enemigos, que van desde simples matones hasta policías de elite equipados con jet packs.
Foto:Insomniac Games
Lo único que no tomaron del juego del héroe de DC fueron los enfrentamientos con los villanos principales, en Spider-Man no son memorables y carecen de ingenio, principalmente, porque no explotan las habilidades del jefe en turno.
La recomendación es poner el juego en la dificultad más alta, ya que así nos vimos motivados a desbloquear todos los movimientos del arácnido y usarlos en el campo de batalla, sobre todo en aquellas misiones donde hay que derrotar a varias oleadas de enemigos.
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Patrulla Araña
Pero no todo es perfecto, Insomniac no logró evitar las viejas características de los mundos abiertos, que ya están desgastadas: torres para descubrir el mapa, bases de enemigos, coleccionables absurdos y misiones secundarias planas.
Esos elementos hacen que se rompa la ilusión de que estás manejando a un héroe. Una gran cantidad de veces tuvimos la necesidad de decidir entre ir por el coleccionable de turno, mochilas viejas de Parker, o rescatar a una persona secuestrada, o frustrar un asalto, o liberar a civiles atrapados en un accidente automovilístico. Por su puesto optamos por la mochila.
Además, los crímenes que aparecen aleatoriamente son repetitivos y ocurren con gran frecuencia que al final terminamos ignorándolos. Lo mismo pasa con las misiones secundarias, hay una tan absurda en la que debemos ¡capturar palomas!
Foto:Insomniac Games
El mundo abierto también corta el clímax de la campaña, rompe la narración y le quita coherencia. En una parte muy puntual nuestro héroe termina malherido y luego de un corte, ya podemos recorrer la ciudad como si nada hubiera pasado.
Tampoco hay consecuencias de nuestros errores, en las misiones en las que debemos rescatar civiles, si llegamos a fallar, no ocurre nada que penalice al jugador o que afecte al personaje.
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Del poder y de la responsabilidad
Insomniac era consciente de la gran responsabilidad que tenían con esta obra y cumplieron. Tanto la jugabilidad, como el plano narrativo funcionan. Y pese a que nunca se menciona aquella frase que todos conocemos del tío Ben, el juego es una metáfora de ella y hasta en la última etapa vemos cómo Peter Parker la honra, porque al final esa es la esencia del sorprendente Hombre Araña. (8.5)
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