El que fue el narcotraficante más rico y poderoso de América Latina, Pablo Escobar, tenía como afición y debilidad, la compra de mansiones —incluso tuvo algunas en Estados Unidos.
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Luego de la muerte de Escobar en 1993, quedaron abandonadas.
En 2003, en la localidad mexicana de Tulum, ubicada en la costa de Quintana Roo, muy cerca de una playa fue encontrada una mansión del "patrón del mal" que estaba escondida entre la frondosa vegetación del lugar. Nadie quiso hacerse cargo de ella.
Fue hasta el 2012 que el galerista neoyorquino Lio Malca la compró y comenzó a remodelarla. Luego de 5 años la mansión del narcotraficante quedó convertida en un hotel boutique de nueve suites y 26 habitaciones llamado Casa Malca.
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Este nuevo hotel, que recién se ha inaugurado pretende brindar una experiencia única a sus huéspedes ya que está decorado con obras de arte.
Tambien intenta ser respetuoso con el medio ambiente, por lo que se busca que no genere impacto en el entorno natural que lo rodea, el mar y la selva.
Así que si quieres vivir unos días como Pablo Escobar, debes alojarte en Casa Malca.
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