La Universidad Georgia Tech ha dado un gran paso hacia la digitalización: mudó más del 95% de sus libros –alrededor de un millón de ítems– a un sitio de almacenamiento compartido con la Universidad Emory, fuera del campus.
Esta iniciativa se enmarca dentro del proyecto Library Next de la institución, que aspira a convertirse en el modelo a seguir del siglo XXI. Conoce los detalles.
Biblioteca del futuro
La antigua biblioteca de Georgia Tech en Crosland Tower solía ser un edificio de ladrillos, con poca o nada de luz para preservar los libros. Este mes, volvió a abrir sus puertas y todo ha cambiado: el complejo de 8 pisos incluye archivos, aulas, salas de estudio, atrios de varios pisos, ventanas de vidrio y acabados de madera, que le dan un aspecto moderno y futurista.
¿Y los libros? Han sido mudados fuera del campus para su conservación. En su lugar hay salones, laboratorios de computación, estudios multimedia y más, destaca el sitio web de la universidad.
Estudiantes y docentes siguen accediendo al material de lectura, que se entrega por “delivery” 24 horas después de solicitarlo online. Esta es la primera etapa del ambicioso proyecto Library Next que se completaría para el 2020.
El plan es “un replanteo fundamental de lo que se supone que debe hacer una biblioteca de investigación en este siglo en una institución académica”, indicó Catherine Murray-Rust, decana de bibliotecas de Georgia Tech, a Business Insider. “Representa que el mundo educativo es digital, no analógico”.
Claro que no todos comparten el mismo entusiasmo por la iniciativa. Para algunos, el proceso de buscar un libro, encargarlo y retirarlo puede desalentar a los estudiantes, al convertirlo en menos accesible que los recursos digitales, recopila Business Insider.
Más allá de las opiniones, está claro que el cambio digital en las universidades llegó para quedarse.
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