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4 preguntas y respuestas sobre la prueba de Pap

"¿Es doloroso?", "¿cada cuánto debe hacerse?" y más preguntas y respuestas sobre la prueba de Pap, clave para la prevención.

Enero es Cervical Health Awareness Month, una oportunidad para aprender más sobre el cáncer de cuello uterino (o cérvix) y cómo prevenirlo o detectarlo. Una de las formas de diagnosticarlo en sus etapas iniciales es la prueba de Papanicoláu (también llamado "Pap" o citología vaginal), se indica desde los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades. Checa 4 preguntas y respuestas al respecto.

¿Qué es?

Se trata de un examen que puede ayudar a detectar y prevenir el tipo de cáncer mencionado. Consiste en un procedimiento en el que se toman células del cuello uterino (que es la porción final del útero que se conecta con la vagina), informa Medline Plus. Luego las células son analizadas para ver si son cancerosas o si presentan signos de que podrían convertirse en cancerosas.

¿Quién debe hacérselo?

La mayoría de las mujeres de 21 a 65 años deberían realizar este examen de forma regular, como parte de su rutina de cuidados de la salud, indica la Oficina Para la Salud de la Mujer (del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU). Inclusive las mujeres que no sean sexualmente activas, que hayan recibido la vacuna de VPH o que ya hayan pasado la menopausia deberían hacerlo.

¿Cada cuánto hay que realizarlo?

Entre los 21 y los 29 años, la recomendación sería cada 3 años. Entre los 30 a los 65 años un Pap cada 3 años y un examen de VPH cada 5 años o, como alternativas, ambos juntos cada 5 años.

En algunos casos sería recomendable realizar el Pap más seguido. Por ejemplo, mujeres que han recibido tratamiento por resultados de Pap anormales en el pasado. También aquellas con VIH o con sistemas inmunes debilitados, entre otros casos. De todos modos, siempre hay que consultar a un médico que podrá dar indicaciones basadas en cada caso particular.

¿Es doloroso?

Es posible que algunas mujeres eviten o posterguen este examen por temor. En algunos casos el Pap puede dar una sensación molesta o incómoda, pero no debería causar dolor. Es buena idea hacer pipí para vaciar la vejiga antes de la prueba.

Ante cualquier duda, siempre consulta a tu médico de confianza.

Para saber más sobre salud femenina, checa cómo el cáncer de mama afecta a las latinas.

 

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