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Aumenta tu productividad con la regla “tócalo solo una vez”

Una sencilla regla para aplicar en la oficina te permitiría ordenar tu mente y ahorrar tiempo. ¡Descubre de qué se trata!

En un día laboral de ocho horas, el empleado promedio solo trabajaría durante 2 horas y 53 minutos. El resto del tiempo, las personas realizarían diversas actividades, como visitar redes sociales y conversar con compañeros de trabajo. Los hallazgos pertenecen a un sondeo de 2016, realizado por Voucher Cloud. ¿Cómo se puede aumentar la productividad? Para realizar más tareas en un día, checa un gran consejo.

"Tócalo solo una vez"

Tal es el nombre de una regla que podría aumentar tu productividad. La idea es que al tocar o ponerse en contacto con algo (un documento o un correo electrónico, por ejemplo) hay que reaccionar de inmediato, se explica en CNBC Make It. La acción a tomar puede ser completar la tarea en seguida o determinar cuáles son los siguientes pasos para lograrlo.

¿Por qué funciona?

Esta estrategia no solo permite ahorrar tiempo, sino que también "limpiaría" el espacio mental. Cuando las tareas y los proyectos se acumulan, crean una sensación de cosas sin terminar, señala Nicole Bandes, experta en productividad, al sitio mencionado. Esa carga mental podría disminuir la capacidad de procesar completamente aquello en lo que se está trabajando.

Escenario hipotético

Checa una situación que probablemente te ocurra en la oficina. Tu jefe te pide que armes una presentación para una reunión, a partir de ciertos documentos, y luego se la mandes a un compañero de trabajo. Tomas esos documentos y piensas "tengo que hacer esta tarea, pero ahora estoy ocupado". Por lo tanto, sigues trabajando. Pero, mientras tanto, continúa estando en tu mente esa presentación pendiente. Durante el resto del día, son varias las ocasiones en que vuelves a tomar los documentos, pero no tienes tiempo para ocuparte. 

Aunque parezca que solo estas gastando algunos segundos, ese tiempo se suma. Y, sobre todo, toma energía mental procesar la información una y otra vez. 

¿Qué puedes hacer?

Un proceso más eficiente en el escenario mencionado podría incluir decidir de inmediato qué pasos tomar. Si no tienes tiempo para realizar la tarea, puedes designarle un período de tiempo concreto en tu agenda, por ejemplo. De ese modo, no volverás a ocupar tu tiempo y energía en pensar que tienes esa presentación pendiente. Lo importante es decidir cuál debe ser la próxima acción y pensar qué puedes hacer para ejecutarla.

Pon en práctica este consejo y verás cómo mejora tu productividad en poco tiempo.

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