De diseños súper coloridos y con campañas de marketing que las asocian al bienestar y al deporte, no es raro que las bebidas energizantes atraigan a niños y adolescentes.
Sin embargo, deberías evitar dárselas a tus hijos, advirtió el Colegio Americano de Medicina Deportiva (ACSM), por medio de un comunicado reciente. ¿Por qué?
Mucha cafeína
Niños y adolescentes serían más vulnerables a sufrir de complicaciones de salud por ingerir energy drinks, por su tamaño corporal y su baja exposición a la cafeína, entre otros motivos, informaron los expertos.
“Nuestro análisis de la bibliografía científica disponible muestra que los niveles excesivos de cafeína encontrados en las bebidas energéticas pueden tener efectos adversos en los sistemas cardiovascular, neurológico, gastrointestinal, renal y endocrino, así como también causar síntomas psiquiátricos”, indicó el Dr. John Higgins, profesor asociado de medicina en la Escuela McGovern de la Universidad de Texas, en el comunicado.
Tan solo 8 onzas de muchas de estas bebidas tendrían más del doble de cafeína que una lata de 12 onzas de refresco de cola, encontró un estudio de 2006, recopilado por el sitio del Hospital de Niños de Stanford.
En bajas dosis, la cafeína aumenta la atención. Pero, en niveles elevados, tanto niños como adultos pueden padecer, según el portal:
- nerviosismo o agitación,
- aumento del ácido en el estómago o problemas estomacales,
- dolor de cabeza,
- problemas para dormir,
- aceleración de la frecuencia cardíaca,
- deshidratación, especialmente después de hacer ejercicio físico.
Más allá de la cafeína…
Las bebidas energéticas suelen tener mucha azúcar. Una lata de 12 onzas puede aportar 150 calorías y ningún nutriente, de acuerdo con el hospital mencionado. Un niño que consume a diario un refresco dulce tendría 60% más de riesgo de obesidad.
Si quieres ofrecerle una alimentación de calidad a tu familia, esta información sobre las calorías en las frutas podría serte útil:
Recuerda consultar al médico antes de implementar cambios drásticos en la dieta de tus hijos, o si tienes dudas sobre su salud.
MIRA TAMBIÉN:
Que tu vaso no te engorde: apunta cómo disminuir las calorías que consumes en bebidas