Dar a otros no es en vano: un estudio encontró que al ser generoso, no solamente estarías haciendo sonreír a los demás, sino también ¡a ti mismo! Sigue leyendo y conoce los resultados de una interesante investigación.
Dar = Felicidad
Al parecer, ser generoso con los demás te haría más feliz, como encontraron investigadores de la Universidad de Zúrich, en Suiza. Es que, dar a otros activaría una zona del cerebro relacionada con la satisfacción y el ciclo de recompensas, destacó el estudio publicado recientemente en la revista científica Nature Communications.
Para arribar a estas conclusiones, se observó a 48 personas, a quienes se les dio una suma de dinero semanal durante 4 semanas. Luego, se los dividió aleatoriamente en dos grupos.
A uno de los grupos, el experimental, se le asignó realizar actos de generosidad con la suma otorgada. Al otro grupo, el de control, se le pidió que gastara el dinero en sí mismo, indica el sitio Medical News Today.
A todos, se les requirió que reportaran el nivel de felicidad que sentían tanto al principio como al final del experimento. El resultado: quienes habían hecho el acto de generosidad sentían más felicidad que los del grupo de control.
No hace falta ser un gran filántropo
Pero no solamente llevar adelante un acto generoso impulsaría tu felicidad. El simple hecho de prometer sinceramente ser más generosos, dispararía en ti ese sentimiento, señala el sitio Science Daily. Incluso, una pequeña muestra de altruismo bastaría para hacerte sentir bien y feliz.
Más horas
Los americanos que se describen como “muy felices”, harían voluntariado un promedio de 5.8 horas por mes, señalaron los sociólogos Christian Smith y Hilary Davidson en su libro The Paradox of Generosity (2014), que reseña el sitio New Republic. Aquellos que se definen como “infelices”, lo harían solamente hasta 0.6 horas. Otros hallazgos a destacar de los expertos son:
- Habría menores tasas de depresión en los americanos que donan más del 10% de sus ingresos.
- Aquellos que dan no solo monetariamente, sino más en sus relaciones, tendrían más chances de lograr una salud óptima, que aquellos que no.
Ya tienes los motivos para ser generoso, ahora, ¡a dar se ha dicho!
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