La violencia doméstica puede dejar marcas en tu cuerpo, sexualidad, autoestima, emociones... No te resignes a vivir con miedo: mereces y puedes tener algo mejor. Prepárate a dar el primer paso, con estos consejos para dejar atrás el maltrato en la pareja.
Anímate a salir
“Alejarse del maltrato no es sencillo. En mi caso, tenía una beba de 3 meses, no tenía trabajo y había empezado a dudar de mis propias capacidades. Pero aun con miedo, me animé a pedir ayuda para que las autoridades pusieran el límite que yo no había podido. Luego, intenté reencontrarme con quien yo era antes de esa relación que me había lastimado: para mí, fue volver a estudiar. Con los meses y terapia, el temor cedió y pude recordar cuánto valía”, nos contó Ariana, comunicadora social de 30 años.
Como ella, tú también puedes escapar de la violencia doméstica. ¿No sabes bien por dónde empezar? Estos consejos podrían ayudarte:
1. Reconoce la existencia del abuso
Las víctimas tienden a minimizar el maltrato, alerta el sitio PsychCentral. No esperes al primer golpe para reconocer la violencia: ésta puede ser verbal, sexual, económica, emocional... Y recuerda que los abusadores suelen disculparse y ser amables después de una agresión. No esperes "que cambie", y aléjate.
2. Protege tu privacidad
Al huir o pedir ayuda a las autoridades, podrías temer que tu pareja se enterara y tomara represalias. ¡Es un temor legítimo! Estas medidas, sin embargo, podrían jugar a tu favor, indica la organización Help Guide:
• Usa un teléfono con cable, en lugar de uno inalámbrico o un móvil, al pedir ayuda. Son más difíciles de intervenir.
• Llama por cobro revertido o con una tarjeta prepaga. Evitarás que tu llamado quede registrado o que pueda rastrearse desde dónde fue hecho.
• Deja atrás el móvil o apaga el GPS, cuando escapes de tu abusador.
• Consigue un nuevo móvil y que tu pareja no sepa que lo tienes. En muchos refugios para mujeres maltratadas podrías obtener uno.
3. Alista un plan financiero
El dinero puede ser un motivo que te retenga en una relación abusiva. Prepararte podría facilitarte el proceso de dejar un vínculo que te lastima. Para eso, el sitio CreditCards.com recomienda:
• Haz copias de documentos importantes, como: resúmenes bancarios, tu partida de nacimiento y las de tus hijos, pólizas de seguros y/o devoluciones de impuestos. Guárdalos en casa de un allegado de confianza.
• Establece una casilla de correo fuera de tu domicilio, para tener una vía de comunicación segura con tu abogado y en la que puedas recibir en adelante tu documentación financiera.
• Abre una nueva cuenta bancaria (usa una institución diferente de la que tenías) y ahorra para cuando estés lista para separarte.
• Pide consejería financiera en alguna organización de violencia doméstica.
4. Busca un refugio para mujeres
Si no cuentas con un amigo o familiar con quien puedas quedarte (y tus hijos, si los tienes) al escapar, busca protección en un refugio para mujeres, agrega Help Guide. ¡No temas! Allí no estás obligada a dar información personal, incluso si te fuera solicitada.
5. Cura tus cicatrices
Después de vivir abuso en la pareja, podrías tener miedos, recuerdos y emociones encontradas. Es que las marcas de la violencia son profundas y pueden durar mucho tiempo. La consejería, terapia y/o grupos de apoyo para sobrevivientes, podrían ayudarte a curarte y aprender a construir relaciones nuevas y saludables.
“Lo reconozco: empezar de nuevo no es fácil y hay días en que las viejas heridas, como cicatrices en la piel, vuelven a doler. Pero se puede. Hoy, agradezco haber podido escapar del maltrato: por mí y por mi hija. Nadie merece vivir con miedo en su propia casa”, concluyó Ariana.
Anímate a salir de la violencia doméstica. Pide ayuda y/o infórmate en este sitio, de The National Domestic Violence Hotline, o comunícate al 1-800-799-7233/1-800-787-3224.
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