Sergio "Checo" Pérez se ha impregnado de olor a champaña nuevamente, una fragancia que comenzaba a parecer ajena al tapatío y que ha devuelto la calma y las sonrisas a Red Bull, tras semanas de incertidumbre.
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“Este resultado que me regresa la confianza, espero que de aquí para delante”, declaró el mexicano a F1 tras haber conseguido el tercer lugar en Austria. El mexicano aceptó haber pasado noches con fiebre e insomnio ante la presión que sufría. Ahora es nombrado en redes como el “Intimidador”, tras las quejas de Carlos Sainz por su rebase por la posición 3. Un apodo que ha sumado para engrandecer su imagen.
"Checo" había quedado fuera de podio en los últimos tres Grandes Premios, con Mónaco, Canadá y España como parte de la pesadilla. Por eso la remontada en Austria, casa de Red Bull, ha sido clave para recuperar confianza y credibilidad, ante un gremio que comenzaba a buscar reemplazo para su asiento.
“Bien hecho 'Checo', fue un fantástico manejo de recuperación, varias grandes maniobras”, le dijo Christian Horner a Pérez, quien también aceptó que con ese ritmo Checo pudo haber peleado por el primer lugar, de no haber arrancado en el lugar 15. Mientras que el doctor Helmut Marko también se desvivió en elogios hacia Checo. “Manejó con superioridad, es increíble, esta vez felicitaciones para Checo por lo logrado”, declaró a la cadena austriaca ORF.
Las alas han regresado al toro que comenzaba a ser mortal.
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