Chevrolet Cruze LS 2011
El Chevrolet Cruze ha sido concebido es el verdadero auto global de General Motors. Está montado sobre una plataforma, la Delta II, conocida internamente como Global Compact Vehicle Architecture, de la que proceden otros modelos de la compañía como el Chevrolet Volt y el futuro Buick Verano, o algunos Opel europeos y se llama Cruze en todos los países en los que está presente, salvo en Corea del Sur, donde sigue siendo el Daewoo Lacetti.
El Cruze es también el sustituto del Cobalt (mejor dicho, lo será), y, como tal, tiene que competir en un mercado tan importante como el de los sedanes compactos, con modelos como VW Jetta, Honda Civic, Toyota Corolla, Ford Focus o Mazda3. Así pues, es un auto global que tiene que respetar todos los gustos de diferentes consumidores en todo el mundo y competir en un mercado tan difícil.
El Chevrolet Cruze monta, en Estados Unidos, dos motores totalmente diferentes, pero con una potencia prácticamente idéntica -sólo difieren en dos caballos-. En nuestra prueba manejamos el motor básico, un cuatro cilindros de 1.8 litros y 136 caballos. El más potente es un 1.4 litros Tubo de 138 caballos.
Al volante del Chevrolet Cruze
En comparación con el anterior Cobalt, lo primero que destaca a nuestro ojo crítico es que el Chevrolet Cruze se ve como un auto más grande y más proporcionado. Con 181 pulgadas de longitud, es casi una pulgada más largo que su antecesor, pero también es media pulgada más ancho (71.4) y una más alto. Asimismo, la distancia entre ejes es ahora de 105.7 por 103.3 del Cobalt, lo cual nos hace presagiar que cuenta con un interior mejor dimensionado. Estas medidas lo colocan junto al Jetta como el sedán compacto de mayor tamaño.
Así que cuenta con un interior relativamente considerable con un buen espacio para piernas en ambas filas. Los 15.4 pies cúbicos que tiene la cajuela hablan por sí solos de lo bien diseñado que está este vehículo (por ejemplo, un Corolla tiene 12.3, un Sentra 13.1 o un Lancer 12.3 pies cúbicos)
El interior es amplio y luminoso, algo a lo que contribuye, sin duda, los destellos azules de los relojes Los materiales y las juntas de los paneles parecen de buena calidad y los duros plásticos se sienten agradables al tacto. La tapicería utilizada resulta convincente.
Una vez puestos en marcha, encontramos rápidamente la postura cómoda gracias a que la columna de dirección es telescópica y pese a que esta versión básica manejada sólo contaba con reglajes manuales.
La cabina está bien insonorizada, apenas se transmiten ruidos parásitos o de rodadura. Los amplios asientos cuentan con un mullido aceptable y aunque el soporte lateral no es extraordinario cumple sobradamente visto lo que ofrecen otros modelos del segmento.
Nuestra Cruze montaba el motor básico un 1.8 litros de 136 caballos que al lado del 1.4 Turbo de 138 caballos, resulta un tanto anticuado, tecnológicamente hablando. En la práctica tiene menos fuerza, peores prestaciones y un consumo más elevado (versiones automáticas). De todos modos, el consumo de este Cruze LS automático se encuentra en torno a las 22 mpg en ciudad y 35 en carretera, muy en la línea de sus principales rivales.
La combinación de este 1.8 litros con la caja automática no es un dechado de prestaciones deportivas, pero resulta suficiente para que el Cruze se desenvuelva con celeridad en ciudad. En carretera, podremos mantener sin problemas ritmos de crucero elevados.
El esquema de suspensiones tiende a primar algo más la firmeza que la suavidad. La dirección resulta precisa y está bien trabajada, aunque nos hubiera gustado algo más de dureza en sus movimientos para casar mejor con el esquema de suspensiones.
A pesar de que el bastidor está bien trabajado y de que las suspensiones resultan más bien firmes, en cambios constantes de apoyo o en incrementos de velocidad en el paso por curva, se muestra levemente nervioso, lejos todavía de algunos de los modelos con mejor comportamiento dinámics del segmento como el Lancer o el Mazda3.
El Cruze comienza en 16,725 dólares en el terminado básico, llamado LS, y se extiende hasta los 21,975 dólares del acabado superior LTZ. Nuestro Cruze LS contaba con el añadido del denominado paquete de conectividad (USB + Bluetooth + Mandos integrados), transmisión automática y algunos detalles más que elevan la tarifa hasta 18,375 USD incluidos gastos de envío. Se trata de un precio competitivo y en la línea de lo que cuestan sus principales rivales.
No te pierdas la fotogalería de esta prueba del Chevrolet Cruze 2011.
- MOTOR Cuatro cilindros 1.8
- POTENCIA 136 HP
- TORQUE 123 Lb/pie
- TRANSMISIÓN Automática 6 velocidades, tracción delantera
- CONSUMO 25 city/32 hwy (26/36 manual)
- PESO 3102 lbs
- PRECIO desde 16,725 dólares