Julio César Chávez
Julio César Chávez González nació el 12 de Julio de 1962 en Ciudad Obregón, Sonora, México. Se formó en el seno de una familia numerosa, pobre y con un padre alcohólico que le gustaba el pleito.
Desde muy pequeño supo la importancia por pelear para salir adelante. Él y sus hermanos se criaron en un barrio donde la competencia por ser el más fuerte era casi sinónimo de juego. Entre golpes, pobreza y sueños, los hermanos mayores de Julio comenzaron a boxear, pero el boxeo no le llamaba la atención.
Sin embargo, inspirado por sus hermanos, mostró su potencia física en un modesto gimnasio. Pronto su talento destacó y comenzó a ganar un poco de dinero a base de los golpes, todo por ganarse el sustento y poder ayudar a su mamá Doña Isabel Chávez.
Su hambre de triunfar en el boxeo lo llevó a mudarse a Tijuana, ahí comenzó a entrenar bajo las órdenes de Rómulo Quirarte, donde fue perfeccionando su técnica. La vida lo sorprendió el mismo día que decidió fugarse con Amalia Carrasco, su novia de quien estaba enamorado desde pequeño, tras recibir la noticia de su vida de que pelearía por el título de Campeón del Mundo. Pronto captó la atención de Don King, quien lo llevó a realizar contratos millonarios, con quien vivió la mejor época de su carrera, pero también los excesos.
Probó la gloria del éxito, pero también las consecuencias del mismo. A lo largo de su carrera, se convirtió por 16 años en Campeón del Mundo, ganó 89 peleas por KO, realizó en total 115 peleas. Sin embargo, su carrera tuvo un declive tras caer en las garras del alcohol y de las drogas que lo llevaron no sólo a perder su carrera, sino también el amor de su primera esposa. El campeón tocó fondo y perdió el foco de su carrera, hasta que casi después de 15 años de vivir sumergido en una vida de excesos, fue gracias a su segunda esposa Myriam y a su hijo Julio César Jr. que con engaños, fue llevado a un centro de rehabilitación donde le costó mucho trabajo desintoxicarse pero una vez que lo logró entendió la importancia de poder ayudar a quienes han padecido lo mismo y así creó su Fundación para combatir las adicciones.
En 2011 ingresa al Salón de la Fama Internacional del Boxeo. Durante su carrera se convirtió en un ídolo para el pueblo mexicano, en una leyenda del box que no sólo era idolatrado en las esferas más altas del poder, sino también del narcotráfico.