-El fotógrafo Charleton Churchill fue el responsable de registrar el histórico momento
-El evento se llevó a cabo a más de 5.300 metros de altura
Casarse es considerado por muchos uno de los eventos más emotivos que se pueden vivir. Ahora imagina si este importante acontecimiento sucede en una montaña nevada a más de 5.300 metros de altura en compañía de tu media naranja y un fotógrafo. Puede que para algunos este no sea el plan más romántico, pero para James Sissom, de 35 y Ashley Schmieder, de 32, esta fue la mejor idea para celebrar el inicio de un nuevo proyecto de vida.
Originarios de Sacramento, Sissom y Schmieder contactaron al fotógrafo y escalador profesional Charleton Churchill en 2016 para pedirle que los ayudara a planear una boda aventurera. Churchill sin pensarlo mucho propuso el Monte Everest. “Es uno de las locaciones más épicas y hermosas en el mundo a la que es difícil de llegar y nadie lo ha hecho antes con vestido y esmoquin”, escribió el fotógrafo en su blog.
Para lograr el cometido, Churchill y la pareja entrenaron durante un año completo. El plan era pasar una o dos semanas en la montaña para aclimatarse antes del gran día. En su blog, Churchill relata que él se intoxicó, el novio sufrió malestar por la altura a la que se encontraban y todos experimentaron temperaturas de -22 grados centígrados.
“James y Ashley fueron excelentes compañeros de sendero”, aseguró el fotógrafo. “Éramos como familia. Ashley es una chica fuerte que aplastó el sendero de la montaña y mantuvo un buen ritmo. James es un gran hombre que cuidó a Ashley atendió sus necesidades”.
Las fotografías que el fotógrafo ha compartido en su cuenta de Instagram han recibido miles de likes y no es para menos, pues parece que salieron de un cuento de hadas o de un documental. Aquí te compartimos algunas.