Una historia de lealtad, amistad, coraje y amor.
Esta es la historia de dos mujeres que se conocieron de niñas. Ángela Valdez era la hija del guardaespaldas de una familia muy adinerada y poderosa, era una niña pobre y humilde. Samantha Sandoval Navarro era la niña rica a quien ese guardaespaldas custodiaba.
Las chicas eran las mejores amigas, pero una tragedia les marca la vida y se verán separadas por muchos años hasta que el destino se encargue de reencontrarlas.
Desde muy joven, Ángela tuvo que aprender a defenderse ya que creció en un barrio peligroso. Desafortunadamente, acaba por enamorarse del hombre equivocado, Luis Martínez, un ex-pandillero y narcotraficante.
Con él tiene una hija, Violeta, y Ángela trabaja día y noche para darle a esta una mejor vida. Ángela estudia por las noches para convertirse en enfermera y tiene una modesta cafetería en la que muestra su mayor habilidad: hacer pasteles.