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"No sé cuál era la fórmula para salir de Afganistán sin caos": Biden defiende su gestión tras la victoria de los talibanes

El presidente admite que los informes de inteligencia señalaron que era probable que la victoria talibán "ocurriera en algún momento de finales de año" y asegura que "nadie previó" que el Ejército afgano se rindiera sin combatirlos.

El presidente, Joe Biden, calificó este jueves como "sencilla" su decisión de retirar a las tropas estadounidenses de Afganistán y, en una entrevista en la cadena de televisión ABC, afirmó: "Miraremos [lo que ha ocurrido] en retrospectiva, la idea de que existía una forma para salir [del país] sin que se produjera caos, no sé cuál era".

Biden anunció en abril que Estados Unidos abandonaría definitivamente Afganistán el 31 de agosto tras 20 años de guerra. Entonces prometió que la operación se haría de forma "responsable, deliberada y segura", y en meses posteriores negó que los talibanes pudieran hacerse con el poder.

Sin embargo, el grupo fundamentalista llegó a Kabul el pasado fin de semana tras conquistar en apenas unos días todo el país sin combates. 

"Creo que no había consenso", apuntó Biden sobre la rapidez con la que los talibanes podían reconquistar el país tras 20 años de dominio estadounidense, "si uno se remonta a los informes de inteligencia, decían que era más probable que ocurriera en algún momento de finales de año".

"La idea de que los talibanes tomarían el control se basaba en que, de alguna manera, los 300,000 soldados [afganos] que habíamos entrenado y equipado iban a rendirse. No creo que nadie previera [que ocurriría] eso", insistió el presidente.

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Cientos de personas aguardan cerca de un avión de transporte C-17 de la Fuerza Aérea estadounidense en el perímetro del aeropuerto internacional de Kabul.Shekib Rahmani/AP / AP

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Biden dijo haber hablado con sus aliados de la OTAN antes de tomar la decisión de abandonar Afganistán: "Estuvieron de acuerdo en que debíamos salir", reveló.

La guerra en Afganistán ha tenido un alto costo para Estados Unidos. Además de los casi 2,500 soldados y 3,900 contratistas estadounidenses muertos, el Gobierno ha invertido casi tres billones de dólares, entre equipamiento militar y entrenamiento a las fuerzas afganas, labores de reconstrucción en el país y otras actividades humanitarias.

Biden indicó este jueves que las tropas permanecerán en Afganistán hasta que hayan sido evacuados todos los ciudadanos estadounidenses: "Vamos a hacer todo lo posible para sacar a todos los estadounidenses y a nuestros aliados", afirmó, algo que prevé que pueda ocurrir en un mes.

 

 

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En cualquier caso, Biden confirmó que los soldados estadounidenses no se irán de Afganistán hasta que no hayan sido todos evacuados, aunque eso suponga superar el límite del 31 de agosto, y que hará todo lo posible por dar una salida a los entre 50,000 y 65,000 afganos y sus familias que colaboraron con Estados Unidos durante las dos décadas de guerra.

La llegada de los talibanes al poder abre una nueva era en Afganistán y obliga a Estados Unidos a replantear su estrategia geopolítica en la región.

Por ahora, Biden recela de que los extremistas hayan cambiado, tal y como ellos mismos reivindican, después de haber ejercido el poder de forma brutal hasta ser derrocados por la coalición liderada por Estados Unidos en 2001.

El martes anunciaron una amnistía general e hicieron un llamamiento para que las mujeres integren su nuevo Gobierno, pero un día después se registraron los primeros disturbios cuando dispersaron violentamente una concentración en Jalalabad, una ciudad fronteriza con Pakistán.

Hay informaciones además sobre la presunta persecución de activistas en Kabul y que las imágenes de mujeres en lugares públicos han sido eliminadas.

En opinión del presidente, la forma de afrontar ahora un Afganistán gobernado por los talibanes "es ejercer presión económica, diplomática e internacional para que cambien su comportamiento".